El Día de la Montaña se celebra el segundo domingo de agosto en Cabezón de la Sal y es un día de exaltación de las costumbres, tradiciones y valores etnográficos de la comunidad. Durante mucho tiempo se ha llamado a este día, además de la Montaña, también como el de Cantabria de forma oficiosa. La celebración está declarada desde 1972 Fiesta de Interés Turístico Nacional y desde 1983 como de interés regional.

Cantabria no tiene un día al uso, al menos de forma oficial. De hecho, el Estatuto de Autonomía para Cantabria, no recoge ninguna fecha como tal, pero celebra este Día de la Montaña, el de la Virgen de la Bien Aparecida que es la patrona y se celebra el 15 de septiembre, y en el Puente de San Miguel, el 28 de julio, que se celebra el Día de las Instituciones de Cantabria.

Cómo se celebra

El Día de Cantabria comienza con música desde de las 10 de la mañana. Las bandas de música componen la Diana, junto con los tradicionales piteros, las charangas, los gaiteros y los bigaristas. Landas recorren las calles de la localidad de Cabezón de la Sal.

Durante todo el día las bandas y las charangas no paran de tocar. A las once de la mañana, se pone en marcha la Feria de Artesanía y Cerámica de Cantabria, con representación de todos los puntos de esta Comunidad Autónoma y, sobre todo, con especial atención sobre la gastronomía cántabra.

El Día de la Montaña

El Día de la Montaña es todo un homenaje al folclore, la naturaleza, la cultura y la artesanía. Es una fiesta de Interés Turístico Nacional desde 1972, celebrada para venerar la identidad de Cantabria, y cuenta con un discurso anual del presidente de la Comunidad Autónoma.

Se celebra en Cabezón de la Sal porque fue el primer municipio de toda la región en pedir la autonomía. También se llama Día de la Montaña porque muchos de los habitantes de la provincia llaman así a su tierra.

Este año se rendirá homenaje a la Corporación local que en el año 1979, dio los primeros pasos para que la región se convirtiera en comunidad autónoma.