ACTUALIDAD

El T-Rex no era tan veloz: igual de lento que un ser humano

Para calcular su rapidez, los investigadores desarrollaron un modelo biomecánico en base al fósil de una hembra de este depredador de 6 toneladas y 13 metros de largo.

0
El T-Rex no era tan veloz: igual de lento que un ser humano
Keegan Houser EFE

Hace alrededor de 65 millones de años se extinguieron los dinosaurios. Uno de los más temidos era el Tyrannosaurus Rex, del que se ha conocido ahora un dato sorprendente: su velocidad al caminar era de 4,6 kilómetros por hora, cifra muy similar a la de los humanos y otros mamíferos.

Así lo ha determinado un estudio publicado en la revista Royal Society Open Science, en el que los investigadores elaboraron un método para calcular la rapidez con la que debía desplazarse este depredador.

Desarrollaron un modelo biomecánico en base al fósil de una hembra de T-Rex de 6 toneladas y 13 metros de largo, a la que apodaron Trix, y cuyo esqueleto se encontraba en perfecto estado cuando fue encontrado en el estado norteamericano de Montana. 

Ritmo del balanceo

A partir del fósil, reconstruyeron en 3D el cuerpo del dinosaurio en movimiento y estimaron el ritmo del balanceo vertical de su cola. De esta forma, al sincronizar esta frecuencia con la longitud de sus pasos, los expertos concluyeron que su velocidad debía ser de 1,28 metros por segundo (4,6 km/h).

Pasha Bijlert, estudiante en la Universidad Libre de Ámsterdam y autor principal del análisis, señaló en el diario Daily Mail que las cifras anteriores apuntaban que su velocidad se situaba entre 7,24 y 10,78 km/h: "A diferencia de nuestro estudio, esos estudios previos no se proponían estimar la velocidad preferida del animal. En su conjunto, esas estimaciones son más altas que las nuestras".

Casi 1.000 kilos de peso

"Parece que el T-Rex no era un caminante muy rápido. Solo tienes que mirar la cola para comprender lo importante que es para su caminata. Es más de la mitad de su longitud. No existe ningún animal vivo que use la cola de la misma manera. La cola entera, según nuestra reconstrucción, de casi 1.000 kilos, era simplemente una masa suspendida por una banda elástica. Y con cada paso, habría rebotado ligeramente hacia arriba y hacia abajo", detalló Biljert.