CORONAVIRUS

El matrimonio de humilde origen turco detrás de la vacuna de Pfizer

Ugur Sahin y Özlem Türezi son la pareja turco-alemana gracias a la cual hoy puede existir la esperanzadora vacuna contra la COVID-19.

El matrimonio de humilde origen turco detrás de la vacuna de Pfizer

Pfizer y BioNTech han anunciado esta semana la alta eficacia de su vacuna contra la COVID-19. Un 90% del 50% que establecía la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) para poder aprobar la vacuna. Gracias al gran trabajo de la farmacéutica estadounidense y la empresa de biotecnología alemana, el mundo podría disponer en apenas unas semanas de las primeras dosis del fármaco contra la enfermedad del coronavirus.

Precisamente es la FDA quien tiene que dar el visto bueno a la distribución de la vacuna una vez que sus creadores soliciten su aprobación. A falta de los últimos resultados, los investigadores creen que podría ser posible a finales del mes de noviembre.

Todo esto ha sido posible gracias a un gran número de científicos y expertos que no han dejado de trabajar para encontrar la cura contra una enfermedad que ha dejado ya más de un millón de personas en todo el mundo. Entre ellos se encuentran los fundadores de BioNTech, el matrimonio firmado por Ugur Sahin y Özlem Türezi.

Ambos son de origen turco, pero han vivido toda su vida en Alemania, donde se conocieron. Ugur nació en Turquía hace 55 años y llegó a Alemania con tan solo cuatro años, cuando su padre emigró para trabajar en Colonia. Özlem nació en el sur de Alemania hace 53 años, después de que su padre viajara desde Turquía para trabajar como médico en el país germano.

El matrimonio se conoció mientras realizaban sus estudios en la Universidad del Sarre y se casaron en el año 2002. Sahin ha afirmado que desde el día de su boda comenzaron a trabajar codo a codo en el laboratorio que abrió sus puertas en el año 2008. Ambos tienen una hija adolescente.

BioNTech inició la investigación para la vacuna en abril

Esto que cuenta Sahin es muy creíble ya que en el mes de abril, la compañía alemana comenzó a trabajar ya en una vacuna para lograr avances en un fármaco que pudiera estar disponible cuanto antes para frenar la pandemia. Destinaron al proyecto a 500 de sus 1.300 trabajadores. El director adjunto, que así se hace llamar Sahin, ya en septiembre adelantó las grandes esperanzas del desarrollo de una inmunización altamente eficaz contra la COVID-19.

"Leí en enero un artículo en la revista ‘The Lancet’ que hablaba de este virus. Me alarmé, porque deduje que ese brote no se limitaría a China, sino que se convertiría en una pandemia mundial. Eso fue crucial para el desarrollo de nuestro plan maestro”, explicó Sahin al medio digital estadounidense ‘Business Insider’.

Vacuna contra el cáncer

Para elaborar esta posible cura con tanta rapidez, los investigadores se basaron en la vacuna contra el cáncer desarrollada por BioNTech, por la que Ugur Sahin fue galardonado en 2019 con el Premio Alemán contra el Cáncer.

Este fármaco contra la enfermedad del cáncer utiliza la tecnología del ARN mensajero, al igual que la vacuna, por lo que con el estudio tan avanzado en la vacuna del cáncer, una parte del fármaco contra la COVID-19 ya estaba hecha. Se aplicaron conocimientos previos a un nuevo proyecto.

Este medicamento contra el cáncer ha sido uno de los mayores logros de BioNTech y sus fundadores. Ahora, si la vacuna contra el coronavirus finalmente es aprobada, Sahin y Türezi podrían convertirse en héroes para todos los habitantes del planeta.

Alianza con Pfizer

La empresa de biotecnología alemana y la farmacéutica estadounidense llevan trabajando juntas desde el año 2018, cundo comenzaron a elaborar vacunas contra la gripe. La iniciativa de BioNTech convenció a la estadounidense que decidió apostar en su investigación contra la vacuna del coronavirus. Pero también se ganó la confianza de Fosun Pharma, la compañía farmacéutica china, con quien BioNTech ha firmado un acuerdo menor que con Pfizer.

La misma empresa estadounidense ha adelantado un total de 185 millones de dólares para el desarrollo de la vacuna y pagará la cantidad de 563 millones cuando el proceso esté terminado y se confirme la primera vacuna eficaz contra el coronavirus.

Entre los más ricos de Alemania

Esta pareja de emprendedores y sobre todo, muy buenos investigadores, se encuentran entre los 100 alemanes más ricos de todo el país. Esto ha sido posible, entre otros de sus logros, a la gran noticia de la vacuna, que ha hecho que su compañía de biotecnología haya aumentado una subida del 23% del valor de su bolsa. En estos momentos, su valor ronda los 18.000 millones de euros, algo más de cuatro veces más que la compañía aérea Lufthansa. Algo demoledor si pensamos que hace un año el valor en bolsa de la compañía era de 4.000 millones de euros. Pero a pesar de su buena situación social, la pareja turco-alemana nunca ha dejado de ser humilde. El matrimonio ha seguido trabajando en la investigación y la enseñanza.

Un reparto justo de la vacuna

Pfizer y BioNTech han firmado acuerdos con varios países para la distribución de la vacuna. Estados Unidos, la Unión Europea, Reino Unido, Canadá y Japón serán los primeros en recibir las dosis una vez que el fármaco consiga la aprobación por parte de la FDA. Pero Sahin quiere un reparto equitativo de las dosis: “Intentaremos proporcionar vacunas en las diferentes regiones de acuerdo con una división justa”, ha dicho el director adjunto de BioNTech al periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung.

De entre todos los acuerdos iniciales, 100 millones de dosis irán para Estados Unidos y otros 200 millones para la Unión Europea: “Esperamos poder entregar una gran parte de los 200 millones de dosis para Europa y los 100 millones de dosis para EE.UU. en la primera mitad de 2021”, ha añadido Sahin.

Venta de la vacuna por debajo de los precios habituales

El director adjunto de BioNTech está dispuesto a vender las dosis por debajo de los precios habituales de mercado debido a la gran demanda que tendrá el nuevo fármaco: “Nosotros tratamos de adoptar un enfoque equilibrado que reconozca que la innovación requiere capital e inversión. La vacuna debe venderse por debajo de los precios habituales de mercado que reflejan la situación en la que nos encontramos, con el objetivo de garantizar un amplio acceso a nivel mundial”, ha explicado para el diario alemán.

Un gigante a largo plazo

Las acciones de BioNTech subieron hasta un 20% tras las primeras horas del anuncio de la efectividad de la vacuna: “No me interesa el valor de mi paquete de acciones. Lo que queremos y en lo que centramos nuestros esfuerzos es en construir una empresa comparable a gigantes biotecnológicos como Amgen o Genentech. Queremos crear valor a largo plazo. Eso es lo que realmente me interesa”, ha concluido Sahin para Frankfurter Allgemeine Zeitung.