Burguer King. Aeropuerto de Kuala Lumpur. Como podéis ver lo del glamour de la F-1, en fin, pues eso... Un jefe de equipo aparece por allí mientras dos compañeros engullen sus hamburguesas como si les fuera la vida. Hablamos sobre Vettel, Webber, Red Bull. Conclusión del tipo: Si es verdad... Maldito off the record...
Este es un post de opinión. Primer aviso a navegantes. Aunque, ahora que lo pienso, quizá haya algún dato que otro o alguna que otra vivencia. Veremos. Empezamos con la premisa básica. Estamos en el GP de Malasia y Sebastian Vettel hizo lo que tenía que hacer: ganar.
Ya lo escribí, como persona, quizá como deportista, perdió mucho de lo que había ganado hasta ese momento. Pero estamos hablando de un tío que ha ganado tres títulos mundiales de manera consecutiva y eso no se consigue alistado en las hordas de seguidores de Teresa de Calcuta.
Recordemos la manera en la que Vettel gana su primer Mundial, utilizando a Webber como cebo para Ferrari y Alonso, después de que el australiano llegase a esa última carrera de Abu Dhabi. Ese mismo año se vieron luchas entre un pìloto en plena madurez como Mark y otro al que aún le faltaba un hervor como Seb. Pero el equipo siempre ha estado con su creacción. Y no va a ser distinto ahora.
¿Por qué Vettel no hace caso a la órdenes de su equipo? Pues porque nunca se las han dado a él, porque siempre le han beneficiado, porque es posible que el alemán pensase, 'estos me están vacilando' Y porque después de la carrera apenas le dijeron nada e incluso esta semana Christian Horner, el jefe de los toros rojos, ha declarado que igual que Vettel lo hubiera hecho Alonso, Hamilton o... (y aquí viene lo bueno) Webber. Una verguenza porque todo el mundo sabe que Webber ha hecho lo que, supuestamente, le pedían a Vettel en Sepang, una dos, tres y varias veces. Vettel siempre ha tenido el apoyo incondicional de su equipo, Webber lo sabe y por eso a veces me sorprende que no sea capaz de hartarse de verdad. Vettel es hijo de Red Bull, de su programa de talentos que ha destrozado mil para hacer realidad uno. Y con él están y estarán hasta el final.
Y ahora vuelvo al principio. Si es verdad... Y es que después de todo lo que ha pasado surge la duda, y si, otra vez, Red Bull está engañando a todo el mundo. QUizá no, pero lo que parece evidente es que nadie desde el muro se desgañitó pidiendo a Vettel que no pasara a su compañero, ni tampoco le dijeron que devolviera la posición, ni ha habido un público e importante tirón de orejas al joven germano, más allá de su petición de perdón de niño malo. Pues eso. Si es verdad...
Y si lo es, Vettel hizo bien, un campeón tiene que ganar. Otra cosa es si de verdad le dijeron a Webber que bajara revoluciones, en ese caso la peineta australiana me parece poco para lo que merecía el campeonísimo. Pero la culpa de todo esto la tiene el equipo, cosas claras desde el principio, milongas al aire que ya nadie se cree sobre igualdad en el equipo, coches que ganan con mirar al resto, etc... es lo que pasa a veces por ser tan buenos. Porque hay una cosa que nadie debe olvidar, al final, doblete de Red Bull, nueva victoria de Vettel y liderato. Esa es la única verdad tangible.
Alonso hubiera hecho lo mismo, dice Horner. No se lo que hubiera hecho el español, blanco de todas las miradas pese a no ganar un título desde 2006 (hay que ser muy bueno para eso, por cierto) pero se me hace raro verle detrás de Massa si puede ganar la carrera. Como a Hamilton. O Schumacher. O a Prost, o Senna, o tantos campeones. Vettel hizo lo que debía. Eso sí, ahora tendrá menos amigos. Aunque Horner, Marko, Newey, Mateschitz.. seguirán viéndole como a un hijo. A veces travieso, pero un hijo. Encima listo...
Ah, se me olvidaba, EN CONTRA de las ordenes de equipo. Esto son carreras de coches, de equipos etc... pero quien de verdad se juega la vida y quien hace que esto emocione son los pilotos, así que, a no ser que dependa un título de ello en un caso muy extremo, que gane el mejor.