José María Manzanares ha indultado un toro de Núñez del Cuvillo en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, ha toreado lento, lo más lento que se puede, a compás, una faena despaciosa y que ha puesto bocabajo la plaza de Sevilla. El alicantino y Arrojado han protagonizado la faena perfecta, la gente así lo vio y premió al toro con el indulto. De su segundo cortó dos orejas y consiguió así abrir la Puerta del Príncipe de la Maestranza.

Al término de la actuación, Manzanares se mostró emocionado ante los micrófonos de los compañeros de Canal +: "El toro ha sido extraordinario, ha tenido clase, ritmo, he disfrutado muchísimo. A veces me tocaba la muleta y me molestaba el viento, me hubiese gustado que no me tocase, pero bueno, ahora mismo estoy que no me lo creo, lo que siento es increíble, estoy en un sueño".

Cortó dos orejas también del sexto de la tarde, lo que hizo que se le abriese de par en par la Puerta del Príncipe: "No me lo creo, de verdad... esto es el sueño de toda mi vida, desde que decidí ser torero , abrir la Puerta del Príncipe era mi objetivo, y me ha costado tanto... me he sentido mu a gusto toda la tarde, la corrida me ha gustado mucho y éste también me ha permitido estar bien". Una vez atravesada la Puerta del Príncipe, Manzanares, emocionado ante la avalancha de gente, no perdió la ocasión para dedicar su triunfo a su padre y a su mujer: "Le dedico esto a mi padre y a mi mujer".