La temporada no podía acabar de otro modo. Ni la de El Juli, extraordinario una tarde más, ni la de ferias, que ha echado el telón con el triunfal cierre de San Lucas en Jaén, donde además de El Juli, que paseó cuatro orejas, han salido en hombros Enrique Ponce, elegante y fácil en su primero y José Carlos Venegas, que sumó en su presentación como matador en Jaén, coso que hoy ha conmemorado el cincuenta aniversario desde su primer paseíllo.

El Juli firmó una faena técnicamente perfecta al segundo, al que supo dar sitio por el pitón derecho y apretar más por el izquierdo. Bien colocado en todo momento, el madrileño conjuntó una obra rotunda que en ningún momento perdió intensidad. Por ello tras la estocada, y pese a los dos golpes de verduguillo, paseó el doble trofeo. De nuevo extraordinario en el quinto, un animal más noble y justo de fuerzas. Julián lo afianzó y le hizo romper hacia adelante a base de temple y cadencia. Le sacó todo el partido y tras un estoconazo dos trofeos de importancia.

Enrique Ponce entendió a la perfección el buen pitón derecho del de Gavira, ganadería que ha reemplazado a la de José Luis Marca, cuyos toros fueron rechazados ayer. Elegante e inteligente en el planteamiento, Ponce remató su obra de una buena estocada. Ponce no tuvo opción con el cuarto, el peor de los cuatro lidiados hasta ahora. Su faena careció de eco y fue silenciado.

José Carlos Venegas debutó como matador en la capital tras su frustrada alternativa y lo hizo a buen nivel, derrochando voluntad en su lote. Desorejó al manso sobrero de Torrealta que cerró feria, al que muleteó con entrega en tablas y que fulminó de buena estocada. Antes mantuvo el buen nivel frente a un bravo Gavira, que quería coger por abajo la muleta y que dio importancia a todo el trasteo. Sólo el fallo con la espada dejó al de Beas de Segura, muy apoyado por el público, sin la segunda oreja.