Una de las certezas sobre el nuevo coronavirus es su capacidad de propagación. Mientras los científicos tratan de establecer su período de incubación, capacidad de infección y medidas más eficientes de control, el COVID-19 ha llegado a Europa, se ha multiplicado en China y Corea del Sur y amenaza a los países con peores sistemas sanitarios. Ante la rápida extensión, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sugerido entre sus consejos utilizar las mascarillas N95, que equivalen, aproximadamente entre las FFP2 y las FFP3 europeas.

¿Qué son las mascarillas FFP2?

Son protecciones respiratorias de autofiltrado que se suelen emplear en entornos laborales en los que las partículas nocivas y mutagénicas se pueden encontrar en el aire. Se emplean en la industria metalúrgica, en la construcción, en la minería e incluso en los trabajos de recolección de basuras. Según el Servicio Riojano de Salud, estas mascarillas de protección tienen como finalidad "proteger al usuario frente a la inhalación de contaminantes ambientales tales como agentes patógenos, agentes químicos, antibióticos, citostáticos,...".

¿Por qué son recomendables para protegerse del COVID-19?

La recomendación para protegerse del nuevo coronavirus se debe a su capacidad de aislamiento frente a agentes biológicos como el moho, los hongos, las bacterias y, por supuesto, los virus. Además, ayudan a mantener las vías respiratorias a salvo.

La OMS ya ha aconsejado su uso cuando hay brotes de tuberculosis, sarampión, varicela o el SRAS (Síndrome Agudo Respiratorio Severo) porque filtra como mínimo el 95 % de las partículas más pequeñas. "Se recomienda el uso de los respiradores FFP-2 en las actividades con bajo o moderado riesgo, mientras que los respiradores FFP-3 se utilizarán en circunstancias donde el riesgo sea alto", según el Servicio Riojano de Salud.

Advertencias

Aunque son altamente eficaces, tanto los fabricantes como los expertos sanitarios señalan que es importante mantener en buenas condiciones higiénicas estas mascarillas si quieren reutilizarse. Es más, se recomienda desecharlas tras su utilización si no se garantiza este punto.

¿Dónde conseguirlas?

Normalmente se suelen vender a las empresas específicas que necesitan este tipo de mascarillas, aunque algunas compañías de venta de equipo de protección laboral venden algunas unidades en sus tiendas 'on line'. El problema para quienes deseen adquirir mascarillas FFP2 es que no se fabrican en grandes cantidades y desde que comenzó el brote del coronavirus en Wuhan (China) se han multiplicado las peticiones. En España son pocas, pero no se puede hacer un negocio de venta de segunda mano porque no se pueden exportar a Asia.