Cargar peso es algo que prácticamente todo el mundo, salvo circunstancias que lo desaconsejen relacionadas con lesiones o enfermedades, realiza a diario. Ya sea al llevar las bolsas de la compra o al mover objetos de diferente peso y volumen en casa o en el trabajo, lo cierto es que se trata de una actividad cotidiana que tiene su réplica en forma de ejercicio en el mundo del fitness.

El farmer’s walk o paseo del granjero es un tipo de ejercicio con muchas variantes en el que principalmente se emplea pesas o kettlebells (pesas rusas) y que también es muy habitual en las competiciones de Strongman, aunque obviamente los kilos que se desplazan y los elementos empleados no están al alcance de la mayoría de los mortales.

Este ejercicio es ideal para incluirlo en cualquier rutina física puesto que por definición hace trabajar la musculatura de brazos, hombros, core y piernas, y está considerado como un gran ejercicio funcional puesto que está orientado a la mejora de labores cotidianas como las mencionadas con anterioridad. Además, también es recomendable en rutinas enfocadas a quemar grasas y perder peso.

Una variante sencilla y eficaz

Dentro del abanico de posibilidades existe una variante sencilla y eficaz denominada Globet carry que consiste básicamente en trasportar una mancuerna o una kettlebell pegada al pecho justo por debajo de la barbilla, aunque también se puede optar por otros objetos que puedan cumplir una función similar.

Puedes optar por recorridos más o menos largos e incluso avanzar y retroceder unos metros. Dependiendo del peso será necesario aumentar o disminuir el tiempo. Si la carga es pesada, un minuto bastará. Si la carga es moderada o ligera puedes extender el ejercicio hasta los dos minutos, como recomienda BJ Gaddour, experto de Men’s Health. Completar de 3 a 5 rondas con un minuto de descanso entre cada una.

Consejos de ejecución

• La progresión es básica. No levantes más peso del que tu condición recomiende.
• Con cargas moderadas ya se obtienen buenos resultados
• Es importante caminar erguido y mirar hacia el frente.
• Evitar desequilibrios y posiciones de inclinación
• Evitar que la cabeza se adelante para no fomentar la cifosis dorsal como consecuencia de nuestros hábitos.
• Si tienes problemas de espalda, es conveniente que consultes la conveniencia de adoptar este ejercicio o el resto de variantes.
• Si tienes dudas sobre la técnica, es igualmente recomendable que consultes con un profesional.