Inventan un traje de neopreno resistente a los ataques de tiburón
La Universidad de Flinders (Australia) desarrolla un material parecido al de los chalecos antibalas que resiste a los ataques de tiburón.
Un grupo de investigación de la Universidad de Flinders (Australia) ha recibido 90.000 dólares de su gobierno local para intentar reducir la tasa de mortalidad por ataque de tiburón. Dado que no existe sistema 'repelente' de tiburones que funcione al 100%, han optado por intentar minimizar el efecto de los mordiscos de escualo cuando son 'inevitables'.
Charlie Huveneers, profesor de la Universidad de Flinders y miembro del equipo de investigación, lo explica así: "La mayoría de accidentes fatales por ataque de tiburón tienen que ver con la pérdida de sangre o el shock resultant de esta pérdida. Si podemos minimizar las heridas, reduciremos también las pérdidasde sangre y en consecuencia incrementará la tasa de supervivencia por mordisco de tiburón".
Resistente a los tiburones... y a las balas
El equipo de investigación sabe que un mordisco de tiburón tiene fuerza de sobras para fracturar huesos. Así, han indagado en un material para el traje de neopreno que pueda absorver esa fuerza y minimizar las heridas. El resultado es un tejido similar al Kevlar, una fibra sintética resistente muy parecida a la que se usa para los chalecos antibalas.
Según 9 News Australia, los investigadores de la Universidad de Flinders empezarán a hacer tests del material entre tiburones del golfo de Spencer, al oeste de Adelaida. Si funcionan, será cuestión de tiempo que los trajes de neopreno resistentes a los tiburones empiecen a comercializarse. Especialmente dirigidos a surfistas y buceadores.
Otros métodos para evitar ataques de tiburón
Aunque los tests funcionen, Huveneers recuerda que los únicos métodos 100% fiables para evitar un ataque de tiburón seguirán siendo dos: "Mantenerse fuera del agua o encerrarles en un recinto".
También se puede probar con el dispositivo que crea un fuerte campo electromagnético que interfiere en los sensores de los tiburones; con detectarlos mediante drones como ya hacen en algunas playas de Australia... o más rudimentariamente con poner un pescado en un dron e intentar alejarles.