La Volta a Catalunya visitó la ciudad francesa de Perpiñán por tercera edición en su historia, siendo la anterior vez en 1955. Una jornada en la que, a diferencia de la inaugural, brilló el sol y la climatología acompañó, dejando atrás la lluvia... aunque se espera que siga haciendo acto de presencia durante la semana. El triunfo fue para el australiano Groves, que toma el relevo a su compañero Matthews, triunfador en Sant Feliu, que esta vez hizo de lanzador. En la salida de L'Escala fueron numerosos los corredores que se acordaron de Colbrelli, ingresado en Girona tras un paro cardíaco el lunes, mandando mensajes de ánimo al italiano, entre ellos Valverde, y con relativa tranquilidad tras las noticias favorables que llegan del hospital.

La fuga se formó pronto, con tan solo nueve kilómetros recorridos, y con tres integrantes: el noruego Jonas Hvideberg (DSM), que repitió escapada y se llevó el gran premio de colocarse líder de la general por las bonificaciones de ambos días, Joan Bou (Euskatel), y Adriá Moreno (Burgos). Llamativo es el caso de este último corredor, que a sus 30 años está disputando su primera temporada completa en un equipo de categoría Pro Continental. "El año pasado, una compañera de trabajo me dijo si no competía en la Volta. Dije que esa era una carrera de máximo nivel, que ojalá, y un año después formo parte", dijo antes de arrancar esta edición. Una aventura de tres, con el mar a un lado y que llegó a tener cinco minutos de renta, que tuvo su fin a 29 kilómetros de meta.

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Sin embargo, la jornada no fue tranquila, ni mucho menos. Hubo varias bajas, como la de Jack Haig de salida, y otras durante la marcha, como la de Richie Porte, segundo en la pasada edición y que, tras descolgarse en una pequeña cota de tercera, echó pie a tierra. Uno de los momentos más extraños sucedió cuando tres corredores, entre ellos Mikel Bizkarra, se fueron por otro lado de la autovía en un desvío, y avanzaron hasta que se dieron cuenta que la mediana no terminaba. Tuvieron que bajarse de la bici y saltar el muro. Después, la tensión fue en aumento, y dos corredores con aspiraciones en la general se vieron involucrados en problemas: Simon Yates y Carlos Rodríguez. Antes pasaron por problemas Soler, al suelo en un descenso, y Sosa.

Esto provocó que fuera una cuarentena de corredores los que se jugarán el triunfo en la meta de Perpiñán, con el sol apurando sus últimos rayos. En un duelo muy disputado, Groves se impuso a Bauhaus para llenar de felicidad al BikeExchange... con el pequeño lamento de Yates al perder tiempo. Matthews, con el maillot de líder, hizo de lanzador a la perfección y su compañero remontó. La Volta habla australiano, aunque el líder, de manera sorprendente gracias a las bonificaciones intermedias y al aguantar en el pelotón principal, es noruego. Hvideberg, tras estar en fuga y ser neutralizado, acabó el 14º. Tuvo su premio. Entre los españoles, Ayuso es 13º, con Valverde 23º. Ambos, bien situados en la tabla antes de la primera gran prueba de fuego de esta Volta: el desenlace con final en La Molina (12,1 km al 4,5%). Será la hora de los favoritos.

Clasificación de la 2ª etapa

1º Kaden Groves (BikeExchange)

2º Phil Bauhaus (Bahrain)

3º Hugo Hofstetter (Arkea)

4º Ethan Vernon (Quick Step)

6º Manuel Peñalver (Burgos)

General

1º Jonas Hvideberg (Nor)

2º Michael Matthews (Aus)

3º Hugo Hofstetter (Arkea)

4º Mattias Skjelmose (Din)

13º Juan Ayuso (UAE)