El Movistar volvió a mostrar su cara más ofensiva camino de Moncalvillo. Endureció mucho la etapa para su líder, Enric Mas, pero esta vez no pudo rematar: “El equipo volvió a trabajar de diez, como llevan haciendo desde que empezó la carrera, pero simplemente no me sentí tan bien como esperaba y no he podido estar con los mejores”. Carlos Verona volvió a ser uno de los encargados de llevar a cabo la estrategia: "Hemos visto que Ineos llevaba la carrera controlada y hemos optado por dar un acelerón en el puerto de la Rasa. No ha salido bien, pero si no lo pruebas no lo sabes”.

Mas se aleja en la general. Marcha a 1:54 de Carapaz, pero no ha perdido la esperanza: “Sigo con ganas y voy a seguir a tope. Aún quedan oportunidades como las etapas de Asturias o la crono de Ézaro”. La parte positiva es que el Movistar está siendo protagonista, corre al ataque, y así es más fácil de que llegue su oportunidad, como asegura Verona: “Estamos muy unidos y eso es buenos para las etapas de Asturias. Podemos dejar fuera de juego a cualquiera”.