Johan Bruyneel se sinceró en una entrevista en Cycling Opinions tras el informe de la USADA de 2012 que investigó la trama de dopaje en el equipo US Postal, donde él ejercía como director con Lance Armstrong, ganador de siete Tours de los que fue desposeído tras reconocer que se dopaba, como gran figura destacada.

El manager belga, suspendido de por vida desde 2018, cree que la lacra del dopaje en el ciclismo aún no se ha terminado. "¿Me arrepiento del dopaje? Eso es una pregunta muy difícil. De hecho, de lo que más me arrepiento es de lo arrogantes que fuimos. Creo que el dopaje era inevitable entonces y posiblemente lo siga siendo. Es una pregunta muy difícil. Es una perna que nos hayamos encontrado en una era en la que dijimos "está bien, si es así, lo haremos'. Si queríamos sobrevivir teníamos que hacerlo. No había otra opción".

Bruyneel también reveló el drama personal que le supuso esta investigación por la que necesitó atención médica. "Fue la mayor lección de mi vida. Ahora soy una persona diferente. 20 años más viejo pero 20 años más sabio. A veces tuve la sensación de que había tocado fondo y nunca me recuperaría. Necesité ayuda médica, tanto mental como física, durante ese tiempo. A veces me encontraba con alguien que me dice 'es increíble que sigas en pie'"

El exmanager del US Postal habló de la caída en desgracia que sufrió a raíz de este escándalo de dopaje. "Soy el ejemplo perfecto de una persona que llegó a estar en la cima del mundo y que de repente cayó en desgracia a gran velocidad. Llegas a la conclusión de que estás solo en el mundo. Desde que se publicó este informe han pasado grandes cosas. Perdí mi matrimonio pero por otra parte he aprendido que por muy mal que pienses que son las cosas, siempre hay otro nivel, hacia arriba o hacia abajo".