La undécima etapa, entre Carpi y Novi Ligure, será totalmente llana. En total, 221 kilómetros serán totalmente llanos con dos puntos intermedios en San Zenone y Pontecurone, ya en la segunda mitad de la jornada. Por segundo día consecutivo, será un día para los hombres más rápidos del pelotón. En Módena fue Arnaud Demare el que se estrenó tras estar cerca varias veces. El francés ya está a tan solo un punto en la maglia cicamino del alemán Pascal Ackermann (155 vs 154), que se cayó en la jornada de ayer y habrá que ver como responde su cuerpo tras semejante golpe.

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La última curva será a 2.800 metros de meta, por lo que la llegada debe ser menos peligrosa que en otras ocasiones de este Giro de Italia. El campeón italiano, Elia Viviani, aún no se ha estrenado y esta será una de las pocas ocasiones que les quede a los velocistas para alzar los brazos ya que el miércoles aparecerá el primer puerto de primera categoría. De momento, Valerio Conti sigue disfrutando de su maglia rosa antes de que empiece lo realmente duro de la carrera.