Simon Yates ha resistido el acoso de los gallos del Movistar en la contrarreloj de Torrelavega. Y no sólo eso: el inglés sale crecido y con más ventaja sobre Alejandro Valverde (a 33 segundos) y Nairo Quintana (a 1:15), quien a su vez pierde la tercera plaza. Yates contuvo a sus dos principales rivales, y también a Miguel Ángel López, que se aleja a 1:34, pero se ha ganado otros dos duros oponentes que exhibieron un gran rendimiento en la ruta cántabra: Steven Kruijswijk y Enric Mas, que se ubican tercero y quinto, a 52 segundos y 1:30, respectivamente. Ante este panorama, ya no hay excusas: si alguien quiere el maillot rojo, tendrá que atacar este miércoles camino del Monte Oiz y el sábado en Andorra.

El triunfo de la contrarreloj se lo llevó Rohan Dennis, un especialista, el mismo que dominó la crono inaugural de Málaga y se enfundó el primer maillot rojo de esta 73ª edición. Dennis corría en otra liga, muy superior a sus rivales: venció con 50 segundos sobre Joseph Rosskopf y Jonathan Castroviejo. La única incertidumbre se vivió cuando Kruijswijk paró el tiempo cinco segundos mejor en el primer paso intermedio (km 10), pero luego no mantuvo ese galáctico ritmo. Si el australiano continuaba en carrera era con Torrelavega en su punto de mira. Ya tiene las dos victorias a las que podría aspirar y hará en breve las maletas. Su mujer está a punto de dar a luz y había llegado a ese acuerdo con el equipo BMC. Dos semanas después, si su paternidad se lo permite, podrá volverse a subir a la cabra para asaltar el maillot arcoíris en Innsbruck.

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La contrarreloj también se presentaba como una eliminatoria interna en el Movistar para decidir el reparto de galones entre Valverde y Quintana. Incluso se especuló con la posibilidad de que el murciano pudiera acabar embutido en el maillot rojo, lo que hubiera despejado todas las dudas. Valverde sale reforzado de Torrelavega frente a su compañero, pero más que mirarse uno a otro, lo que tendrá que hacer el equipo telefónico es mover tácticamente ambas bazas. No queda otra. Alejandro, curtido en cientos de batallas, lo tiene claro: "Yo estoy más cerca, pero hay que jugar a la estrategia". 

Torrelavega nos ha traído otros dos invitados contrapuestos en la lucha por el podio. Por un lado tenemos a Kruijswijk, un veterano de 31 años que viene de terminar quinto en el Tour de Francia y que estuvo a punto de ganar el Giro de 2017. A su equipo, el Lotto-Jumbo, le va la marcha y no rehúye la pelea. Y por otra parte está Enric Mas, un joven de 23 años de la cantera de Alberto Contador, que prefiere ser cauto porque todavía no conoce sus límites. De momento está demostrando una enorme madurez y ya ha superado una crisis durante la carrera con la ingesta de antibióticos. Tiene todo el porvenir por delante, pero nada pierde por probar. El podio le espera a 38 segundos. Y el sueño rojo, a 1:30. El futuro empieza por el presente. No hay que dejar para mañana lo que puedas hacer hoy.

Simon Yates volvió a mostrarse un líder consistente, pero las diferencias no son grandes y todavía hay terreno por delante para que la general pueda dar un vuelco, especialmente este miércoles en el País Vasco y, sobre todo, el penúltimo día en Andorra. Su equipo, el Mitchelton, ya no podrá dejar la patata caliente a otros, como hizo la semana pasada. Y le han crecido los enemigos por el camino. 

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