Lance Armstrong: "Mi doping es el trabajo y el esfuerzo"

TOUR 2001

Lance Armstrong: "Mi doping es el trabajo y el esfuerzo"

Lance Armstrong: "Mi doping es el trabajo y el esfuerzo"

EFE

Lance Armstrong acomete el Tour 2001 con un carácter más alegre y simpático. Siempre se ha transmitido de él una imagen de hombre callado, poco conversador, que huía de los periodistas. Ahora no parece presionado por los pronósticos, que le sitúan como principal hombre a batir en búsqueda de su tercera ronda gala. Su próxima paternidad y su exhibición en la Vuelta a Suiza le han dado confianza.

- Parece tranquilo, ¿cómo afronta este Tour de Francia?

- Según se acerca el momento de empezar crecen la tensión y la responsabilidad. Pero me quiero sustraer de todos los comentarios y plantear el Tour en la forma que mejor me convenga y sin locuras. Si me quieren atacar desde el principio, será cuestión de mis rivales...

- ¿Va con una táctica preconcebida a la carrera?

- Todos los ciclistas tenemos marcados nuestros momentos decisivos, pero después todo va en función a los acontecimientos. El Tour no es una carrera para volverse loco desde el primer día. Hay que dosificar las fuerzas y saber cuándo se puede atacar con opciones de éxito. Lo que prima es la regularidad y llegar el primero a París. Las gestas están bien, pero el público se acuerda sólo de los ganadores.

- Con tanta publicidad y medios de comunicación, ¿se está perdiendo la épica del ciclismo?

- En absoluto. Hoy en día este es un deporte más calculado que antes y donde cuenta muchísimo la labor de tu equipo. La gente quiere emociones y en todas las grandes carreras se producen situaciones de garra que ponen a los aficionados de pie. Con táctica o sin tácticas, después hay que llegar el primero a la meta y si estás solo te la tienes que jugar.

- En la Vuelta a Suiza se le ha visto bien en la crono y en la montaña.

- No tiene comparación con el Tour, pero los indicativos han sido satisfactorios. Muchos habían dicho que venía de paseo y se han equivocado totalmente. Esos no conocen al verdadero Armstrong. Después de todo lo que me ha pasado procuro batirme al máximo en cada prueba. Para hacer cicloturismo me hubiera quedado en Estados Unidos.

- El anuncio de la próxima llegada de los gemelos le ha venido bien. ¿Traerán el pan en forma de tercer Tour bajo el brazo?

- (Tras una ligera sonrisa y un recuerdo para su esposa Kristin y su pequeño de dos años David Luke, se muestra muy convencido en su respuesta). Siempre que hay un nacimiento se producen buenas noticias. Y aunque el Tour es antes que el parto, creo que será un síntoma favorable. Desde luego que voy a correr con más ganas que nunca y en busca del primer puesto. Hay muchas bocas que alimentar en mi familia...

- ¿Está satisfecho del equipo que ha formado este año en el US Postal?

- Sí y ya lo estamos demostrando. En algunos sectores de la crítica se había dicho que muchos no me aguantaban, pero en este año se ha demostrado que se pueden hacer muchas cosas. Todos estamos con muchísimas ganas y los ensayos han sido excelentes.

- ¿Una tercera victoria en el Tour podría significar un adiós definitivo del ciclismo?

- No. Un deportista profesional siempre quiere ganar más y más veces. Si me llevo el triunfo intentaré ir por el cuarto. Creo que en ese apartado me pasa como al español Miguel Indurain. Si se pueden hacer registros históricos, no hay que desperdiciarlo.

- Analicemos a uno de los rivales que tendrá en la lucha por lo más alto: Jan Ullrich.

- El alemán siempre es un peligro. Él prepara el Tour a su estilo y los rumores dicen que en esta edición se ha entrenado de una forma especial. En mi cuaderno de notas tengo la vigilancia a Jan como una de las principales tareas. Estoy convencido de que estará en los momentos decisivos de la carrera.

- ¿Qué me dice del pelotón español?

- Por experiencia, sé que de un ciclista profesional español se puede esperar lo mejor. No puedo descartar a ninguno, seguro que alguno estará ahí. Al joven Beloki ya lo descubrimos el pasado año. Si esta temporada ha mejorado, puede aspirar a todo.

- ¿Es un alivio para usted que el italiano Marco Pantani no corra el Tour?

- La decisión la ha adoptado la organización y yo no tengo nada que ver con ella. En lo deportivo Marco da mucho juego, pero egoístamente tengo que decir que me quito un rival de en medio. Las cosas no se pueden esconder. Este año se ha dicho que Pantani no había hecho nada, pero en el Tour se transfiguraba y era capaz de todo, deportivamente hablando...

- ¿Qué opina de estas historias publicadas de compras de etapas y trasiego de dinero en mano?

- Sólo sé lo que he leído en los periódicos, pero me cuesta pensar que sean verdad. Se han mencionado nombres de corredores con los que he corrido y nunca me ha pasado algo así a mí. Parece como si solo interesaran del Tour temas escandalosos y de morbo. Nada de esto nos viene bien a los corredores de cara a los aficionados, lo fundamental de este deporte.

- ¿Volverá a ser este un Tour de escándalos?

- Los escándalos no han beneficiado en absoluto al Tour ni al ciclismo, pero si las reglas se quieren cumplir a rajatabla hay que acatarlas y erradicar la lacra del dóping. Mi deseo para el Tour del año 2001 es que sólo nos tengamos que preocupar de lo que ocurra en las carreteras y no en incautaciones, detenciones y sobresaltos.

- El año pasado se especuló con que por causa de su enfermedad podría utilizar sustancias prohibidas y esta temporada se han analizado las muestras de su equipo. ¿Le preocupan estos temas?

- No tenemos nada que esconder. En cuanto a mí es normal que, tras lo que pasé con mi enfermedad y llegando las victorias, a algunos les duela e intenten buscar cosas raras. No van a encontrar nada, porque sencillamente no lo hay. Mi doping es el trabajo y el esfuerzo. La vida me ha hecho superarme y no necesito ningún tipo de estimulante raro. Con vivir y disfrutar de mi familia tengo suficiente; con lo mal que lo he llegado a ver todo...

- ¿Qué será de Armstrong cuando deje el ciclismo?

- No lo sé. Disfrutar a tope con los míos un tiempo y, quién sabe, después volver al ciclismo como director de equipo. He aprendido a vivir intensamente el presente y eso es lo que hago.

Sus frases

"Por experiencia, sé que de un ciclista español se puede esperar lo mejor"

"Al joven Beloki ya lo descubrimos hace un año; si ha mejorado, puede aspirar a todo"

"Los escándalos no favorecen en nada al ciclismo, pero hay que erradicar la lacra del doping"