SpiderMAV, el dron volador que lanza telarañas magnéticas

Una de las cosas que más ha gustado de la reciente película Spider-man Homecoming de la Marvel es el traje del trepamuros, al que las industrias Stark dotaron de mil y un artilugios y gadgets diferentes -como el dron que lleva en el símbolo del pecho o la asistente IA Rachel. Y es que al ver el siguiente dispositivo, es imposible no pensar en ello, porque este dron parece eso mismo: un diseño salido de la mente de Tony Stark para apoyar al nuevo Vengador que se une al grupo y, que de hecho, se llama SpiderMAV. Simplemente brillante.

SpiderMAV, el dron que lanza telarañas

Uno de los elementos que los drones fabricados para el mercado de consumo sigue procurando conquistar es el de la perfecta flotabilidad, que el aparato se quede en el mismo sitio. Hay algunos que lo clavan y otros que parecen azotados por una inexistente corriente de aire. Y de hecho el estar ahí, ‘levitando’ es de los trucos que más batería consumen. Por ello a veces es complicado usar un dron para una operación que exige manipular algo delicado (como cables eléctricos) o sacar fotos. Y por ellos unos investigadores del laboratorio de Robótica Aérea en el Imperial College London han hecho realidad lo que a priori parecía una locura: ¿Qué sucede si cruzas a Spider-man con un dron?

Pues SpiderMAV es la respuesta: un dron DJI Matrice 100 en toda su apariencia que vuela, se eleva y flota como el resto de los que hay en el mercado, pero que esconde un secreto en forma de lanzador de telarañas. Y no es coña, el dron es capaz de volar y lanzar una telaraña de repente, una telaraña magnética que se acopla a las superficies metálicas o con elementos / partes metálicas. ¿Para qué? Pues para estabilizar mejor el aparato, ayudarle a trepar por superficies o dejarlo fijado a una para realizar arreglos, operaciones o sacar imágenes sin que el temblor sea un problema.

El futuro para los drones

El SpiderMAV funciona así: primero lanza una telaraña para engancharse a un sitio, y una vez cercano y estabilizado, lanza otra desde la parte superior en vertical si hay un techo del que colgarse, o en horizontal para afianzar la posición con algunos de sus varios lanzadores que disparan usando un gas comprimido. El aparato está en fase de pruebas, como vemos en los vídeos, pero sin duda que sus posibilidades sobre el papel son enormes. Vale que ahora parezca eso mismo, un dron que lanza telarañas temblorosas, pero imaginad cuando pulan el concepto: drones capaces de anclarse, trepar y mantener posiciones de forma perfecta.