NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

NBA | CELTICS 107 - MAVERICKS 89

Porzingis: “Hoy me he reafirmado en que soy bastante bueno”

El letón Kristaps Porzingis fue el absoluto protagonista del primer encuentro de las Finales de la NBA de este 2024, en el que ganaron los Celtics.

Kristaps Porzingis -
MADDIE MEYERAFP

Las Finales han comenzado y de qué manera. Boston sacó a pasear el factor positivo de tener a los aficionados de su lado para ofrecer un espectáculo acorde a su dominio durante la fase regular. Así se ponen por delante en esta serie definitiva.

El primer partido de la edición de este año marcó el regreso a las canchas de Kristaps Porzingis, que había pasado un mes sin jugar a causa de un pinchazo en el sóleo de la pierna derecha. Entre otros dos pívots, Horford y Kornet, habían suplido al letón frente a Cavaliers y Pacers. Pero sí se notó su vuelta: 20 puntos en 21 minutos, entrando como suplente, más 6 rebotes y 3 tapones. Como si no arrastrara ni molestia alguna ni falta de ritmo. De hecho, su racha volcánica en la primera parte fue el impulso que ayudó a establecerse a los Celtics en una diferencia de entre 15 y 20 tantos que supieron administrar.

Los Celtics volaron con el pívot formado en Sevilla. De jugar en el poste alto e ir ganando confianza en ataque a cambiar tiros en defensa como hace cuando está en forma. Es un elemento fundamental para que los célticos puedan ganar.

Porzingis se mostró aliviado en la rueda de prensa posterior tras semejante actuación: “No ha sido ideal estar tanto tiempo parado, pero me ha ayudado a prepararme mentalmente y ha dado resultado, hemos sacado el trabajo adelante. Hoy ha sido una reafirmación para mí de que soy bastante bueno. A lo mejor no soy perfecto, pero soy un rato bueno, puedo jugar así y darle un extra a este equipo”. Eso es, al fin y al cabo, lo que estaba buscando el presidente Brad Stevens cuando le rescató de Washington Wizards el pasado verano. Algunos compañeros expresaron sus halagos de diferentes formas: White apuntó que “emparejarte con él es una pesadilla”; Brown destacó que “tuvo un partido monstruoso” por “su presencia lanzando y atacando los cambios”; Horford, el que fue titular en el puesto de ‘5′, dijo que le “sorprendió gratamente ver lo bien que jugó, lo hizo muy fluido y con mucha energía y moviéndose bien”. Con mucha ironía sabiendo las leyendas de Boston, y refiriéndose tanto al letón como a Hauser y Pritchard, declaró Jrue Holiday que “hasta nuestros chicos blancos se pusieron a defender”, dando valor a la capacidad de estos Celtics del game 1 para cerrar al grifo a hombres como Doncic o Irving.

Reencuentro con Doncic

Justo uno de los elementos a tener en cuenta en la previa de estas Finales entre Celtics y Mavericks era el morbo de las parejas con destinos cruzados. Irving es ex de Boston. Porzingis es ex de Dallas. En el caso del europeo, además se sumaba el mal rollo con el que terminó su relación con Doncic. Ya se han explicado parte de los motivos por los que aquello no acabó bien. El espectador habitual reconoce el interés de esta historia; nada más salir a pista Kristaps le tocó batirse en duelo en el poste alto, donde sacó la falta en tiro, con Doncic, a lo que el público del Garden respondió con murmullos de los que sólo se escuchan con fenómenos atractivos.

Publicado en AS el 6/6/2024

Por Mike Maestre

Según el propio Porzingis el inicio, cuando participaba menos porque se recuperaba de su lesión grave de rodilla, todo era una balsa de aceite. “Los dos intentamos que funcionara, pero desde luego la comunicación y la madurez tenía que haber sido mejor por las dos partes”, apuntó el año pasado. J.J. Redick, compañero fugaz de ambos, sitúa el punto de inflexión con Doncic en una reacción furibunda de Kristaps, llamándole crío a Luka cuando se dirigía al banquillo, pero había mucho más. “Fue una mezcla de todas cosas. Falta de madurez, por supuesto. Y ahora me refiero a lo que yo podría haber hecho mejor. Tendría que haber sido más maduro. Y eso de los números y la estadística avanzada... Si en ese momento alguien hubiera venido a explicarme bien las cosas (‘esto es lo que necesitamos hacer, esto es lo que es mejor para ti y esto es lo que te convierte en un jugador más efectivo’), creo que todo podría haber sido muy diferente. Aquello se convirtió en un concurso de ver quién meaba más lejos”, declaró también. El fuego cruzado rozaba el esperpento por momentos: Doncic, “Porzingis es un gran jugador y debemos usarle más, eso es todo”; Porzingis, “trato de ser lo más profesional que puedo” o “he tratado de saber lo que me piden que haga y ya está”. De cara al exterior, mala imagen para una franquicia que de por sí pasaba por otros problemas de reputación. En un momento hasta Mark Cuban, máximo accionista hasta este año, se vio obligado a salvarles diciendo que “Nowitzki y Terry no eran los mejores amigos al principio” y alcanzaron la gloria en 2011. La relación se rompió abruptamente en febrero de 2022, cuando los Wizards le acogieron a cambio de enviar a los Mavs a Davis Bertans y Spencer Dinwiddie (cruciales para el éxito de aquella campaña, donde únicamente los Warriors les apartaron del camino). Los dos han mantenido que el tiempo ha sanado la herida, se respetan, se aprecian. Las Finales de la NBA les enfrentarán por el premio más grande. Mucho que abordar.

·

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.

Normas