Partido grande el que se jugaba esta pasada madrugada en Milwaukee. Frente a frente el actual campeón y una de las revelaciones de la temporada. Bucks vs Bulls. El encuentro fue emocionante, con 16 cambios de liderazgo y 15 empates, aunque esa emoción vino sobre todo por los errores en el tiro de ambos equipos. Los locales acabaron con un 38,6% en tiros de campo y un 19,4% en triples. Los visitantes, con un 36,5% y un 18,4%, respectivamente. Un día para olvidar que sirvió para demostrar que los Bucks tienen eso que se viene a llamar espíritu del campeón.

Se puede decir que fue asó como sacaron adelante una victoria que, por otra parte, a punto estuvo de escaparse. DeMar DeRozan (35 puntos, máximo anotar del encuentro) falló un triple a falta de 21 segundos que habría puesto a los Bulls dos arriba. Justo después Khris Middleton metió dos tiros libres y ahí se acabó todo. Giannis Antetokounmpo, el mejor de los suyos (30 y 12 rebotes), lo explicaba así: "Al final, una victoria es una victoria. Hemos hecho lo que teníamos que hacer, hemos creado buenos hábitos esta noche". 

La jugada del partido no fue ninguna canasta (evidentemente), si no una falta de Grayson Allen a Alex Caruso cuando este se disponía a finalizar una jugada al contraataque con un mate en carrera. El jugador de los Bucks llegó por un lado para intentar taponar y, aunque con una mano fue al balón, con la otra tiró del brazo del jugador de los Bulls mientras este estaba en el aire. Le desequilibró totalmente y Caruso cayó de forma muy fea al suelo, con todo el peso de su cuerpo sobre un brazo. Estuvo dos minutos tumbado en el suelo y Allen fue expulsado después de que los árbitros le señalaran una flagrante de tipo 2. Después del partido Billy Donovan, entrenador de Chicago, no se mordió la lengua: "Estando Alex en el aire como estaba y la forma en que le ha mandado al suelo podría haber acabado con su carrera. Allen tiene un historial con este tipo de acciones y eso, para mí, es verdaderamente peligroso. Espero que la liga se tome muy en serio esto porque le podía haber lesionado de gravedad".

Los Bulls, que hace nada eran líderes del Este y podían marcar distancias con sus perseguidores, ya han visto como les han adelantado los Nets e igualado los Heat. Sin duda, las bajas de Zach LaVine y Lonzo Ball están lastrando al equipo. La mala noticia es que el segundo de ellos tendrá que pasar por el quirófano y no jugará en 6 u 8 semanas. Veremos si está disponible para alguno de los tres duelos que aún tiene que disputar estos dos equipos en temporada regular. Unos enfrentamientos que este año han tomado una nueva y atractiva dimensión.