La generación de 2018 en la NBA ha tenido uno de sus veranos decisivos si no el que más. Tocaban renovaciones por el máximo, en caso de merecerlas, y en algunos casos eran obvias (Luka Doncic o Trae Young, dos de los cuatro agraciados). Algunos estaban escalones por debajo y se han quedado fuera y tampoco han accedido otros que sí peleaban por ese preciado contrato. El caso de DeAndre Ayton, mejorando mucho por momentos y que llegó a ser decisivo para meter a los Suns en las Finales 2021, es el más agudo, pero también se ha quedado sin extensión Marvin Bagley, de los Kings: los dos fueron los primeros elegidos de la camada hace tres años y ahora no son dignos, según la opinión de los dirigentes, de llevarse la mochila llena a casa. 

Los no elegidos serán agentes libres restringidos, si sus equipos quieren retenerles, para el próximo mercado de verano. Siendo lottery pick, es decir, entre los catorce primeros, tenemos estos nombres entre los, por clasificarlos de alguna forma, olvidados: DeAndre Ayton (1º), Marvin Bagley (2º), Mo Bamba (6º), Collin Sexton (8º), Kevin Knox (9º), Miles Bridges (12º) y Jerome Robinson (13º).

Ayton se quedó tan chafado al no poder alcanzar un acuerdo antes del límite que declinó hablar con la prensa. Pese a la presión de los compañeros, como Paul asegurando en las eliminatorias que se merecía el dinero o Bridges refrendando que quiere quedarse siendo valorado, Robert Sarver, que no se caracteriza por ser uno de los dueños más flexibles, ha creído que era demasiado dinero. Lo que quería el bahameño era el máximo, esos 172 millones que se pueden convertir en 207 si te eligen para alguno de los mejores quintetos del torneo. Según el periodista Adrian Wojnarowski, Ayton se ha disgustado mucho. Lógico, es sólo el cuarto cabeza de cartel de un Draft NBA que no es renovado cuando llega este momento y los otros tres son Kwame Brown, Greg Oden y Anthony Bennett, que se quedaron lejos de estar a la altura a la que Ayton se ha situado. 

Bagley era uno de los que tenía claro que no iba a ser renovado, sobre todo por el rumbo que ha tomado su carrera. Necesita un nuevo giro a la misma y en los Kings han perdido tanto la fe que ni le han renovado ni parece que vayan a coger la opción de hacerle restringido en verano, según informa la prensa local, por lo que sería incluso libre para irse cuando su vinculación actual expire. Problemas con las lesiones y falta de continuidad en un equipo todavía encallado pese a las idas y venidas de entrenadores y jugadores le han machacado. Con Thompson y Holmes tiene presencia restringida como pívot, los Queta, Metu, Jones o Len le pueden restar todavía más protagonismo e incluso se ha probado a Harrison Barnes de alero alto. Su posición es complicada y está ante la temporada en la que tiene que ganar algo más de visibilidad e impacto. 

Los dos primeros de la generación se han visto sobrepasados por Luka Doncic, el hombre al que esos dos equipos rechazaron. Los Suns tenían a Igor Kokoskov como entrenador, el hombre que había llevado a Eslovenia a ganar el EuroBasket, y los Kings contaban con Vlade Divac, cuyo conocimiento del baloncesto europeo como arma rompefronteras está fuera de dudas, pero ninguno de ellos se decantó por un Doncic que ya se aseguró el máximo de 207 millones por 5 años.