Laia Palau, capitana de la Selección, reconoce que Serbia no es el equipo que hubieran elegido para cuartos. "No nos vamos a engañar. Serbia era uno de los rivales al que no nos apetecía enfrentarnos. Para mí Serbia y Francia son dos equipos que te pueden plantear problemas, por maneras diferentes que tienen de jugar. Pero Serbia, sobre todo, por su experiencia en grandes partidos, jugadoras que han sido muy dominadoras en Europa y que nos les tiembla mucho el pulso en este tipo de citas".

La base cree, que a su favor, está la nueva identidad que ha logrado España en este Eurobasket. "Pienso que así como nosotras tenemos muy claro quién es Serbia, no sé si ellas tienen muy claro quién es España ahora mismo. El equipo es diferente y aunque conservemos el ADN, creo que estamos jugando de una manera diferente y también creo que si mantenemos este ritmo de los últimos días somos un equipo difícil de ganar".

La capitana avisa que están "con mucho respeto, pero también con confianza" en estos cuartos. "La gente se siente bien, vamos creciendo en el campeonato y cada día vemos cosas diferentes de jugadoras diferentes. Pero la identidad de los equipos se forma cuando se consiguen resultados. Mañana estamos en cuartos, que es donde queríamos estar, pero a partir de aquí hay que seguir. Mañana es uno de estos partidos que hace ilusión porque te pone el listón alto y prueba si el equipo tiene esa pasta para competirlo. De momento, es para estar muy orgullosas".

Mondelo: "Serbia querrá morir matando"

Por su parte Lucas Mondelo reconoce que el primer objetivo, llegar a cuarto, está cumplido. "Ahora hemos llegado también en un nivel que parece bastante óptimo, pero delante nuestro está una selección con una gran experiencia y veteranía como es Serbia. Tiene un poquito de todo", analiza el seleccionador sobre su rival. "Es un equipo muy polivalente en ataque y defensa. Va a ser no sólo un partido de carga táctica y talento individual, sino de fortaleza mental. Nosotros creo que estamos cogiendo bien los roles, el estilo. Hay gente que ha dado un paso hacia delante. Esperemos que estas jugadoras sepan gestionar el éxito y que el día que no estén también, sumen y remen".

Mondelo reconoce que "un día está mejor una y otra día, otra", pero que todas al final están haciendo un trabajo colectivo atrás. "Es la clave de nuestro juego: atacar al ataque. A partir de ahí nos permite jugar en transación, con situaciones de lectura que nos permite decisiones más acertadas al tener más espacios para atacar".

Mondelo da la clave: "Estará en la interpretación defensiva de lo que hacen y, sobre todo, el control del rebote defensivo. Ellos juegan mucho un caos controlado por su talento. Provocan muchas pérdidas y descolocan mucho al rival. Están acostumbradas mucho a este juego. Son muy duras, el arbitraje tendrá mucho que decir porque juegan al límite, como no puede ser de otra manera. Si controlamos ese rebote y nuestros bases no caigan en la trampa de sus presiones, tendremos un pasito muy avanzado, que es lo hemos hecho siempre contra ellas. Obligarles en balance defensivo, que es su peor arma, porque quedan descolocados. Cada uno jugará sus bazas. Nosotros estamos en construcción y ellas querrán morir matando porque es el último baile de algunas".