Hace un mes volvió el Real Madrid volvió a adentrarse en un territorio que ya conocía: intentar fichar a Vasilije Micic, uno de los combos exteriores de mayor calidad del continente europeo. Que para la próxima temporada se cuente con Causeur, Llull, Carroll y Rudy en el '2' y con Alocén y Heurtel en el '1' no era óbice para hacer un último movimiento en las líneas en las que se dirigen las operaciones, con este serbio de 27 años como objetivo prioritario. Pero no llegará. Y, como en el caso de Gabriel Deck, no sólo la NBA sino Oklahoma City Thunder es quien se cruza en el camino. 

En un movimiento adelantado por Chema de Lucas en 2 Contra 1, Micic está decidido a jugar en la NBA la próxima temporada. Su agente, Misko Raznatovic, ejerciendo comprensiblemente su labor, ha desmentido este ofrecimiento. El Efes es uno de los candidatos a ganar la Euroliga, pero ni ello -de ocurrir- frenaría la llegada del jugador de Kraljevo a Estados Unidos a partir de agosto como agente libre. 

La llegada de Micic a EE.UU. quedó aplazada tanto por la cuantiosa renovación ofrecida por el Efes en 2019, cuando más sonaba para el Real Madrid, pero siempre estuvo en su cabeza. Los Sixers eran los que tenían sus derechos desde 2014, cuando se presentó al Draft de la NBA, pero el pasado otoño fueron los Thunder los que adquirieron esos derechos. La apuesta por el baloncesto internacional es clara en Oklahoma City, como demuestran no sólo la llegada de Deck sino la presencia de Pokusevski, Maledon o Svi Mykhailiuk en la alineación titular, y con Micic ocurrirá lo mismo. La reconstrucción tras las salidas de Westbrook y George, y de Kevin Durant anteriormente, es lenta y Sam Presti ha priorizado la juventud a la necesidad de ganar ya, por lo que el plan con Vasilije es el de la adaptación y el progreso en plena madurez como jugador. Se desconoce aún con qué contrato aterrizaría, pero sí se debe dar por sentado que jugará allí en la 2021/22.

Micic está promediando 16,4 puntos en la Euroliga esta temporada, ha sido MVP de varias jornadas de la misma y su asociación con Shane Larkin, también con aspiraciones en la NBA, es una de las más peligrosas del Viejo Continente. Para hacerlo posible su salida ha tenido que desoír la gran propuesta del Real Madrid, una oferta importante que evidencia que se hará una inversión importante en la plantilla que dirige Pablo Laso para seguir en la vanguardia.