ATLANTA HAWKS

Poca conexión entre Trae Young y su entrenador en los Hawks

En Atlanta se especula con que, pese a que el rumbo del equipo no se arregla en poco tiempo, la relación entre estrella y técnico es perjudicial.

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Trae Young
Jerome Miron USA TODAY SPORTS

Los Hawks son uno de los conjuntos de los que más se espera en unos pocos años. Su reconstrucción parece ir por buen camino debido a las piezas que han logrado gracias al draft. El tirador Kevin Huerter, el poderoso John Collins, interiores con recursos como Bruno Fernando o DeAndre' Hunter, un ex de Duke muy versátil como Cam Reddish o la reciente incorporación de un pívot de mucho nivel, Clint Capela, rodean al que es la indudable estrella de este equipo: Trae Young, que llegó en 2018 tras el afamado traspaso con los Mavericks por Luka Doncic. 

La fuga del último gran equipo, el que reunió bajo el ala de Mike Budenholzer (ahora, en los líderes Bucks) a jugadores como Al Horford, Kyle Korver, Paul Millsap, DeMarre Carroll o un Jeff Teague que está de vuelta, lleva más de dos años arrastrando a la franquicia por el barro de la NBA y eso les ha llevado, por obra y gracia, a conseguir a esos jugadores jóvenes que ahora hacen soñar con un futuro brillante. 24-58 en 2018, 29-53 en 2019 y, teniendo en cuenta el parón por el coronavirus, 20-47 en 2020.

Son números desastrosos que, por otra parte, no quitan la sonrisa a los aficionados de Atlanta. Sí lo puede hacer la última información surgida en la ciudad en relación al equipo. La aporta Chris Kirschner, de The Athletic. La relación entre la gran estrella, Trae Young, y el entrenador, Lloyd Pierce, no es ni mucho menos buena

Young ha confirmado las sospechas que se tenían de él en su año de universidad: buen triplista y anotador punzante, pero sin dejar de lado una excelente visión de juego. Tiene problemas para defender y quizás de ahí viene esa falta de conexión. Pierce es un hombre joven (43 años) pero metódico, siendo uno de los que Popovich ha incorporado al cuerpo técnico de la selección de Estados Unidos, y ésta es su primer oportunidad como principal en la NBA tras estar once años como asistente.