Trae Young está convencido de que los Lakers habrían ganado el anillo si no se hubiera suspendido la temporada. El jugador de los Atlanta Hawks ha justificado este pensamiento hablando de LeBron James y el espectacular nivel que estaba mostrando. "Estaba en una misión diferente. Es una de las mayores locuras que he visto en mi vida. Es lo más grande que han visto mis ojos", afirmaba tajantemente la joven estrella, compañera de generación de Luka Doncic.

Desde luego, la apreciación del base tiene su justificación. Los Lakers venían de ganar a Pelicans, Sixers, Bucks  y Clippers en cuatro victorias consecutivas con las que empezaban a asustar y en las que LeBron promedió 30 puntos, 9 rebotes y 11 asistencias. El nivel del alero, reconvertido en base esta campaña, estaba siendo excepcional, con 25 puntos y más de 10 asistencias de promedio (líder de la NBA en este apartado) a pesar de encontrarse en la 17ª temporada de su carrera y contar con 35 años de edad. Y los Lakers estaban siendo uno de los máximos favoritos al anillo, liderando además la conferencia Oeste con un récord de 49-14.