La NBA tratará de adaptarse a las circunstancias y de ofrecer un final de temporada 2019-20 siempre que sea posible y que la crisis del coronavirus no obligue a acabar en la suspensión total. Para ello, está dispuesta a flexibilizar su formato todo lo que sea necesario. Así que todo es incertidumbre en estos momentos, pero sí hay unas líneas maestras que empiezan a quedar claras: está asi descartado que se pueda jugar con normalidad, con viajes constantes y público en las gradas. Lo normal, y ahora mismo una opción óptima, sería que los 16 equipos clasificados para playoffs se concentraran en una sola ciudad y jugaran series que podrían ser al mejor de tres y sin público. Esto permitiría que al menos la temporada 2019-20 tenga campeón.

La Regular Season ya no podrá salvarse ni un escenario muy optimista. Con los equipos en 64,7 partidos de media (deberían haber jugado 82), lo mejor que se plantea la liga es que lleguen a 70. Eso hace que cada uno vaya a jugador unos cinco, seis o siete partidos y que, por lo tanto, la clasificación final se vaya a mover poco. En caso de que hubiera playoffs serían, de este modo, con una estructura de enfrentamientos muy parecido a la que quedó fijada el 12 de marzo, cuando se dejaron de jugar partidos. Serían estos:

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En el Este, los Bucks serían primeros, los Raptors segundos y los Celtics, terceros. Esto parece inamovible. Heat, Pacers Sixers se repartirían los tres siguientes puestos y los Nets defenderían el séptimo, con solo medio partido de ventaja sobre los Magic con el objetivo de evitar a los Bucks, el gran ogro de la liga.

En el Oeste, el primer puesto de los Lakers (5,5 partidos de ventaja) es intocable, los Clippers tienen un partido y medio sobre los Nuggets y estos, uno y medio sobre los Jazz y dos sobre los Thunder. Los Rockets están en empate técnico con los de OKC y Mavs y Grizzlies parecen destinados a ser, en ese supuesto, séptimo y octavo. Los de Tennessee acabaron con dos partidos y medio de ventaja sobre los Blazers, que ya no llegarían a tiempo en condiciones normales. En este esquema los Lakers solo se verían los Clippers en la final de Conferencia y los de Kawhi tendrían un lado de su cuadro infernal (Mavericks en primera ronda y luego el ganador del Nuggets-Rockets) mientras que, siempre a priori, LeBron James y Anthony Davis tendrían una ruta teórciamente más sencilla hacia esa final del Oeste: primero Grizzlies, después Jazz o Thunder.