Día marcado en rojo en el calendario para los dos equipos tal y como se está desarrollando la temporada. Phoenix Suns y Minnesota Timberwolves, que venían ocupando la séptima y octava plazas del Oeste durante casi toda la temporada, se veían las caras en Arizona en un encuentro que quién sabe si a la larga puede tener una importancia crucial. La victoria fue para los locales, que después de una mala racha y algunas dudas sobre su capacidad para mantener el ritmo de los playoffs parecen haberse recuperado y vuelven a ganar partidos a un ritmo parecido al del 50% de victorias, un porcentaje que este año puede ser bueno para ganarse un puesto en la post temporada.

El encuentro mostró una igualdad total hasta el último cuarto. En un duelo maravilloso entre las dos estrellas, Booker (26+4+7) y Towns (33+15), dos jugadores que tienen todas las papeletas para estar en el próximo All Star. La diferencia la marcaron el resto de compañeros. Mientras que el primero tuvo alrededor un buen coro apoyando sus solos, el segundo se quedó a medias sin el resto de voces. Apenas Wiggins (23+4+4) y Teague desde el banquillo (16 y 4 asistencias) aportaron a los Wolves. Lo demás fue un páramo y ante un equipo que juega como eso, como un equipo, y además muy bien como son los Suns, depender únicamente de tres jugadores pasa factura a lo largo de 48 minutos.

Como decíamos, Booker sí que tuvo ayuda y de la buena. Entre otros la de Ricky Rubio, que ya ha dejado atrás sus problemas de espalda y lleva varias noches dando auténticas exhibiciones de cómo manejar los tiempos de un partido. Es su tercer encuentro con al menos 13 asistencias (14 hoy) a las que sumó 16 puntos y 4 rebotes. Junto a él, la tercera pata del banco de los Suns ahora mismo que nunca decepciona. Kelly Oubre Jr. (24) es el escudero perfecto en la anotación de Booker. Además, Dario Saric (20+9), que parece haber despertado de su letargo, y Mikal Bridges (9+8+4+3+2), cada vez siendo más importante, también están sumando a buen ritmo. Y por si esto fuera poco regresó Aaron Baynes después de cuatro partidos de baja (sólo había jugado uno de los últimos diez) y ya volvió a ser importante: 12 puntos y 4 rebotes en tan sólo 15 minutos.

En definitiva, victoria muy importante para unos Suns que mantienen la octava plaza, mientras los Wolves caen de puesto de playoffs (10º) por primera vez en muchas semanas. Esas dos últimas plazas del Oeste (tres si los Jazz siguen haciendo el tonto) van a estar muy caras. Los Thunder han superado a todos y ya son séptimos, los Kings están novenos y ya no se puede descartar a Spurs (11º) y Blazers (12º), otrora desahuciados y ahora con algo de vida.