El entrenador de los Golden State Warriors, Steve Kerr, ha revelado este martes que muy probablemente Klay Thompson, una de las estrellas del equipo, no podrá jugar ningún partido esta temporada, ya que se está recuperando de una rotura del ligamento cruzado de la rodilla izquierda. En declaraciones a NBC Sports Bay Area, Kerr ha afirmado: “Es poco probable que juegue este año. Hemos dejado la puerta abierta en caso de que la rehabilitación vaya rápido, pero tenemos que ser conscientes de que es una convalecencia de nueve meses”. Thompson se lesionó en el sexto partido de la final de la NBA, el pasado 13 de junio.

En el día en que empieza la temporada de la NBA, Kerr ha querido rebajar las expectativas de la afición sobre un eventual regreso de Thompson, de 29 años, esta temporada. “Hay que ser realistas. Yo me rompí el ligamento cruzado en la universidad, y me perdí toda una temporada. La realidad es así”, ha declarado el técnico. El entrenador ha afirmado también que, mientras que dure la baja del escolta, los más jóvenes del equipo deben echarse el equipo a las espaldas y hacer lo posible para que los Warriors no noten la baja de una de sus estrellas.

El propio Klay Thompson se refirió recientemente a su lesión, y reiteró que no forzará para recuperarse. “Lo último que quieres hacer es regresar rápidamente. Por mucho que me mate no estar en la cancha, la paciencia es una virtud, y volver corriendo no sería muy inteligente”, señaló. El escolta se operó tras lesionarse, y no quiere saltarse plazos. Según el presidente de los Warriors, Bob Myers, la baja del jugador se extenderá por lo menos hasta el fin de semana del All Star, en febrero de 2020.