Malas noticias para los que estuvieran esperando al próximo martes noche para ver el debut de Zion Williamson en la NBA. De momento parece que habrá que esperar varias semanas más. Ese es el tiempo que, según Adrian Wojnarowski, los Pelicans van a tener a su nueva estrella fuera de las pistas. Todo comenzó en la noche de ayer de Estados Unidos, cuando el equipo de Nueva Orleans confirmaba la baja del número 1 del draft para el último amistoso de pretemporada que se jugará esta noche en el Madison Square Garden. Se apuntaba a molestias en la rodilla derecha y algunas informaciones decían que no era un simple descanso, habitual en este momento del año. Que podía ser algo más serio.

Esos augurios se han cumplido y Zion estará varias semanas (aún no se sabe la duración exacta de la baja) por una lesión que tampoco se ha señalado con exactitud pero que está relacionada con la rodilla derecha. Los problemas físicos es un temor que muchos tienen con el rookie debido a su peso (129 kilos en 1,98 metros), pero lo cierto es que en su año de universidad en Duke los únicos minutos que se perdió fueron a raíz del percance con la zapatilla que le explotó al inicio de uno de los partidos más esperados de la temporada frente a Carolina del Norte. 

También es cierto que la temporada NBA es mucho más exigente en cuanto a lo físico, por el número de partidos y el nivel de los rivales. Pero Zion no se ha lesionado en temporada, sino en pretemporada, con los equipos aún a medio gas. Habrá que esperar a que expliquen qué es lo que le pasa exactamente. De momento su preparación estaba siendo perfecta, igualando todas las expectativas que había puestas en él. Promediaba 23,3 puntos y 6,5 rebotes en 27,3 minutos de juego, con unos porcentajes absolutamente asombrosos.