Aún faltan dos meses para que arranque la nueva temporada de la NBA y los Lakers ya han recibido su primer mazazo: DeMarcus Cousins se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda en un entrenamiento de pretemporada el pasado jueves. El pívot, que firmó este mismo verano con los angelinos un contrato por un año y 3,5 millones, estará de baja un mínimo de cinco meses. Pero lejos de lamentarse, el bloque de Los Ángeles ha decidido mover ficha para suplir esa baja.

Hace pocos días salieron a la palestra una serie de candidatos a los que le podía llegar la oportunidad de ocupar esa plaza en los Lakers. Finalmente, la franquicia californiana ha decidido evaluar a Joakim Noah, Dwight Howard y Marreesse Speights en unos entrenamientos individuales que preparan para esta misma semana, tal y como ha afirmado Adrian Wojnarowski (ESPN). Esos tres nombres aparecían en la lista, al igual que el del polaco Marçin Gortat, a quien también quieren considerar los Lakers para estas sesiones.

El único de esos cuatro jugadores que cuenta con contrato en vigor es Howard: le queda una temporada en Memphis a razón de 5,6 millones. Sin embargo, la franquicia de Tennessee está abierta a negociar con los Lakers. Del mismo equipo procede Noah, que se ha convertido en agente libre este verano. Mo Speights, por su parte, viene de jugar en China tras ocho cursos en la NBA, y Gortat también llegaría como agente libre tras no renovar su contrato con los Clippers. Es el jugador que poseía la ficha más alta de los cuatro (13 millones), pero su veteranía (35 años) y el hecho de estar sin equipo son motivos suficientes para que pueda ver con buenos ojos una oportunidad como la que le puede llegar. Encima sin hacer mudanza.