La participación de Zion Williamson en la liga de verano celebrada en Las Vegas ha sido un visto y no visto. Nueve minutos ha sido lo que el joven ala-pívot ha disputado de la competición preliminar a la temporada regular de la NBA. El pasado viernes hizo su debut oficial con los Pelicans en un duelo ante los New York Knicks, equipo en el que ha terminado recalando su amigo y compañero en Duke RJ Barrett, y tuvo que retirarse antes de llegar al descanso tras un choque fortuito.

Lo cierto es que el encuentro acabó pronto tanto para Zion como para el resto, ya que un terremoto de 6,9 en la escala de Richter hizo saltar las alarmas en el Thomas and Mack Center de Las Vegas, obligando finalmente a suspender el duelo en el que se estaban imponiendo los de Nueva Orleans por 80-74. Esto sucedió bastante después de que la primera elección del draft de los Pelicans diera el susto: solo llevaba 9 minutos sobre el parqué, en los cuales ya había mostrado parte de su potencial (11 puntos), cuando un choque de rodillas con un rival le obligó a embocar el túnel de vestuarios antes de tiempo. 

Finalmente el joven ala-pívot sufre una contusión en la rodilla izquierda. La lesión no reviste de gran importancia pero la directiva ha decidido ser cauta con su futura estrella. "Zion se recuperará de este incidente sin problemas. Sin embargo, teniendo la mayor precaución posible, hemos tomado la determinación de que no aparezca en ningún partido de lo que resta de Summer League", confirmaba el vicepresidente de operaciones de los Pelicans David Griffin en un comunicado que también aprovechaba para restar importancia a la decisión: "Aun así, el jugador seguirá participando en los entrenamientos y acondicionándose al equipo".