La temporada de los Houston Rockets acabó antes de lo que esperaban y, por lo que se sabe ahora, de forma poco amistosa. Shams Charania ha publicado un artículo en The Athletic en el que habla de la situación de los Rockets tras caer ante los Warriors y de algunos asuntos que estaban en suspenso durante toda la temporada y que ahora, con el equipo ya de vacaciones, han salido a relucir.

El más importante tiene que ver con el desacuerdo entre Mike D'Antoni y parte de su plantilla con la forma de jugar del equipo. Varios jugadores, entre ellos Chris Paul, le habrían recriminado varias veces durante la temporada que el equipo compartía muy poco el balón en ataque. Una referencia directa al protagonismo absoluto que ha tenido James Harden esta temporada. Con sus 36,1 puntos, 6,6 rebote, 7,5 asistencias es el gran aspirante al MVP junto a Giannis Antetokounmpo.

Pero esa dependencia del escolta la han notado los Rockets en playoffs. Harden ha metido 5 puntos menos por partido tirando un 1,5% peor desde la línea de tres. Los equipos le han defendido mucho mejor, como si después de 82 partidos de liga regular haciendo lo mismo le tuviesen perfectamente estudiado. Y ha habido momentos en los que el equipo texano ha demostrado no tener un plan B con el que sacar los partidos adelante.

El descontento de Paul llegó a su punto álgido en el decisivo sexto partido ante los Warriors, cuando en varios puntos del encuentro tuvo momentos tensos con James Harden, hasta que al final del encuentro todo explotó. "Harden y Paul tuvieron momentos de tensión entre ellos a lo largo del sexto partido que culminaron en un enfrentamiento verbal en el vestuario, según informaron a The Athletic fuentes con conocimiento de la situación. Estas fuentes dijeron que el intercambio verbal entre Harden y Paul era por la distribución de balón a lo largo del partido. En el momento en el que el resto de la plantilla estaba lista para hablar de lo que había pasado, Paul y Harden se habían ido por caminos separados", explica Charania.