James Harden podrá disputar con total normalidad el tercer partido de las semifinales de la Conferencia Oeste ante Golden State Warriors (madrugada del sábado al domingo, 02:30). Las pruebas a las que se sometió el base en Houston descartan que las córneas que se dañó durante el segundo duelo en el Oracle estén dañadas, según informa la ESPN.

El base sufrió un golpe involuntario de Draymond Green en la lucha por un rebote durante el primer cuarto que le provocó una contusión en ambos ojos y una laceración en el párpado del izquierdo. El jugador tuvo que retirarse a vestuarios y durante todo el duelo, ambos ojos estuvieron inyectados en sangre.

Las molestias en su visión fueron nítidas (entrecerraba los párpados por la luz durante el duelo y la conferencia de prensa) pero no le impidieron cuajar un buen encuentro: 29 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias.

"Apenas podía ver durante el partido, ahora mismo de hecho veo todo bastante borroso", aseguraba Harden a la prensa nada más certificarse la segunda derrota seguida de los Rockets frente a unos Warriors que lideran la serie por 2-0.