Esta noche ha quedado cubierta la primera ronda del March Madness 2019 sin peligro real de la que habría sido la gran sorpresa del torneo: North Dakota State no solo no derrotó a la Duke de Kryzewski sino que finalmente (85-62) solo hizo daño en la primera parte (31-27). En cuanto los Blue Devils se sacudieron la tensión emocional del debut en el torneo, pasaron sin apuros por encima de un rival mucho menor: el +4 era un +20 en apenas seis minutos (52-32) con un parcial total de 54-35 en la segunda parte. El triunfo supone el 14-0 para Coach K en partidos de primera ronda cuando parte como número 1 de su cuadro y un 30-4 total.

Zion Williamson no jugó un partido superlativo pero acabó con 25 puntos como siempre eficientes (12/16 en tiros) y 3 rebotes. Y, sobre todo, se desperezó tras el descanso, con 13 de los primeros 21 puntos de Duke en el despegue definitivo. Seguido por una 'Zion cam' todo el rato (nadie quiere perderse ni un plano de sus highlights), fue más espectacular pero menos constante que la otra gran estrella de su equipo, el canadiense RJ Barrett, que no debería ir más allá del número 4 del próximo draft (en el peor caso) y que acabó con 26 puntos, 14 rebotes y 3 asistencias. Es la primera vez que dos jugadores de primer año alcanzan los 25 puntos en un mismo partido del torneo final. En la sombra, una vez más, Cam Reddish (otro muy posible top 10), que anotó 12 puntos, y el distribuidor Tre Jones (5+3+4). Con todas sus armas, Duke parece la gran favorita para el título o, como mínimo, tan favorita como cualquiera que se quiera poner a su nivel.

Tacko Fall, en el camino de Zion al Sweet 16

Ahora, en segunda ronda y por un puesto en el Sweet 16, Duke jugará contra Central Florida (UCF). Los Knights, al quinto intento, lograron el primer triunfo de su historia en el torneo, 58-73 ante VCU. Excelente imagen de un equipo que ha llegado en gran momento al torneo y que tiene uno de los jugadores que más atención está captando: el gigantesto pívot senegalés Tacko Fall, un 2,29 que destrozó a VCU: intimidación constante, rebotes sin saltar, finalizaciones cerca del aro y la sensación de que su se mueve siempre fuera de su plan de juego habitual por culpa de su envergadura imposible. Al final, 13 puntos, 5 tapones y 18 rebotes, el récord en el torneo de un jugador de la ACC:

Ahora UCF, sin nada que perder y ciertamente casi sin opciones reales, reta a Duke en busca de una sorpresón monumental. Al menos, el duelo Fall-Zion dará que hablar porque el inacabable pívot ya ha dejado claro que no se va a amedrentar: "Es muy difícil hacer mates contra mí. No se lo voy a permitir, no me va a poner en sus vídeos de highlights. Es un tipo de jugador que no se había visto nunca. Es inmenso, es muy rápido para su peso... pero nuestros entrenadores prepararán bien el partido".

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