El baloncesto es caprichoso y puede variar en tan sólo siete días. Avenida pasó de tener bola para ganar al líder del Grupo B de la Euroliga Femenina, el Dynamo de Kursk, a perder en la Liga DIA con contundencia ante su gran rival. El balón de Elonu rebotó tres veces en el aro mientras se encendía la luz de final de partido. Si se hubiese salido del aro, hubiera significado la tercera derrota consecutivo de un equipo poco acostumbrado a perder. Pero cayó dentro, y eso convierte a las de Salamanca en uno de los pocos equipos de Euroliga con balance positivo después del final de la primera vuelta (4-3) después de ganar hasta en tres ocasiones fuera de casa (Letonia, Francia y Grecia).

El partido tenía su dificultad. A pesar de que Olympiacos no ha conseguido ninguna victoria esta temporada en Euroliga ha jugado partidos de mucho nivel en los que la poca experiencia de sus jugadoras ha impedido un resultado distinto. Las griegas plantaron cara a las españolas con una defensa agresiva y con cierto acierto en el tiro exterior. Las de Lino López dominaban el rebote, pero no conseguían ventajas superiores a los 7 puntos a pesar del buen trabajo de Elonu, Eldebrink o Robinson. Precisamente un 2+1 de la pívot americana ponía el 66-67 a falta de 18 segundos. Anotaba Spyridopoulou a falta de seis segundos y devolvía el dominio en el marcador a Olympiacos. La jugada planteada por Lino López era un bloqueo directo a Silvia para una penetración de la internacional, que lo hizo todo bien aunque el balón se salió del aro. Y ahí apareció la mano milagrosa de Ada Elonu.