El San Pablo Burgos consiguió la segunda victoria de la temporada ante el Breogán en un partido que dominó de principio a fin.

Los locales, presionados por las dos derrotas consecutivas que habían padecido, salieron al Coliseum con la intensidad que les faltó en citas anteriores y lograron desde el inicio abrir claras diferencias en el marcador. Dos triples de Frazier en los primeros minutos dieron la confianza necesaria a los de Diego Epifanio que llegaron al final del primer cuarto con doce puntos a su favor (26-14)

En el segundo cuarto y a pesar de entrar en cancha la segunda unidad, los burgaleses siguieron incrementando su renta para alcanzar el descanso con ventaja (47-34).

Tras el paso por vestuarios los entrenados por Natxo Lezcano reaccionaron tímidamente gracias a la facilidad anotadora de Redivo, pero nunca llegaron a inquietar a los burgaleses aunque por primera vez bajaron de los diez puntos de desventaja (50-41). Pero esa pequeña reacción fue un espejismo porque San Pablo volvió a dominar el rebote defensivo y con una gran dirección de juego de Fitipaldo y el acierto en el aro contrario de Thompson y Frazier lograron cerrar un partido que nunca llegó a peligrar para los burgaleses que respiran ante la próximo visita a la cancha del Real Madrid.