Llegó el día: madrugada del miércoles 17 al jueves 18 de octubre, 04:30 hora española: Luka Doncic jugará su primer partido oficial en la NBA. Lo hará con 19 años y 232 días y en un Phoenix Suns-Dallas Mavericks. En el desierto de Arizona y en un duelo entre dos equipos que eran gallos del Oeste hace no mucho y que ahora están en proceso de reconstrucción. La temporada pasada los Suns ganaron 21 partidos y los Mavericks, 24 (24-58).

Los Mavs llevan dos años sin playoffs y los han comenzado 2-13 y 2-14, respectivamente. Así que tienen la vista fijada en este primer partido ante un rival accesible, en teoría, dentro de un Oeste tan duro como casi todos los años. En realidad, regresar a playoffs exigirá una mezcla de perfección y golpes de fortuna para el equipo de Rick Carlisle (uno de los mejores entrenadores de la NBA), que desde que fue campeón en 2011 ha jugado las eliminatorias en cuatro temporadas de siete posibles. Y en las cuatro perdió en primera ronda.

Sin los lesionados Dirk Nowitzki (cuando regrese será el primero en jugar 21 temporadas con la misma camiseta: una leyenda) y Harrison Barnes, la atención para los aficionados de Dallas estará centrada en el estreno de DeAndre Jordan (fichado por un año y casi 23 millones de dólares) y la puesta de largo de la pareja que debería iluminar el futuro de la franquicia: Dennis Smith Jr y Luka Doncic. Dos bases muy diferentes y, por lo que se ha visto en pretemporada, con capacidad para ser muy complementarios. Un número 9 y un 3 de draft (2017 y 2018). Los motores del equipo con más jugadores no estadounidenses de toda la NBA: siete.

Para Doncic el partido es evidentemente especial por ser el primero de lo que debería ser una carrera muy larga en la NBA. Con todos los ojos puestos sobre él, se las verá con DeAndre Ayton, el número 1 del draft y con el que se repartió durante meses los primeros puestos de los mock drafts de todas las páginas especializadas. Y se las verá, sobre todo, con Igor Kokoskov, el técnico serbio que debuta en el banquillo de los Suns (el primero head coach europeo a tiempo completo) y con el que Doncic ganó el Eurobasket 2017, pistoletazo de salida de la extraordinaria temporada pasada del base, que por fin, después de tantos meses de análisis, noticias, y previsiones, se estrena esta noche de forma oficial como jugador de la NBA.