A apenas diez metros del comedor del Gran Hotel La Laguna donde la selección de Estados Unidos almorzaba, Lucas Mondelo, seleccionador nacional, habló en la previa del España-Japón (21:00 horas) que supondrá el pistoletazo de salida de la XVIII Copa del Mundo de baloncesto. “Hemos hecho un grandioso trabajo este verano. Los pequeños inconvenientes los hemos convertido en motivación. Hemos pasado el Rubicón y toca jugar. Alea iacta est. No sé qué pasará en el campeonato pero si es seguro que el equipo será el de siempre, que el carácter es innegociable y no os van a decepcionar como grupo. Este grupo es irrepetible y este Mundial una manera de hacer un homenaje en casa por tanto que han hecho fuera”.

El seleccionador no se quitó presión (“la tenemos siempre”) pero sí se colocó número tres en la lista de candidatos: “Favorita sólo hay una Estados Unidos. Y luego FIBA, no yo, dice que la segunda favorita es Australia”. España, por cierto, tiene en un hipotético camino a la final a Japón y Canadá o Francia, que están entre el puesto 5 y 7 como favoritas”. La lesión de Silvia Domínguez y las molestias de Alba Torrens parecen superadas: “Llegan en buenas condiciones y si nos falta un punto lo cogeremos por días. Pero todas las jugadoras están disponibles para mañana. Tenemos el plus de la presión, pero la queremos convertir en ilusión. Lo más importante es ser nosotras”.

Mondelo cree que la preparación ha sido la correcta como para que España puede aguantar un formato en el que, aparentemente, jugará tres partidos en cuatro días y luego tres en otros tres: “Físicamente el equipo está preparado para soportar esto pero penaliza mucho los errores. Los formatos más largos te permiten entrar más suave. Aunque no hubiese gasolina al final ya el equipo jugaría solo. Esto hay que masticarlo y lo vamos a masticar”.