"Cállate y dribla". Estas tres palabras fueron pronunciadas por Laura Ingraham, periodista de FOX News (cadena de cabecera de Donald Trump), al informar sobre una conversación pública entre LeBron James y Kevin Durant en la que criticaban al presidente de los Estados Unidos. Para la mayoría de los jugadores de la Liga norteamericana, el actual inquilino de la Casa Blanca es el gran enemigo, el causante de un nuevo despertar de racismo y xenofobia en un país norteamericano fragmentado, que busca ejemplos a los que agarrarse para no caer definitivamente en el abismo. 

Y algunos han surgido en la NBA. LeBron James, Allen Crabbe, Derrick Rose, Carmelo Anthony y Stephen Curry han realizado durante estos últimos meses acciones de diversa carga social y solidaria no solo en Estados Unidos, sino también en otras regiones del mundo. 

La más mediática y de mayor envergadura fue la de LeBron. El alero no se ha ido del todo de Ohio. Ha dejado gran parte de su alma en su Akron natal, la ciudad que le vio crecer sin padre, solo bajo el ala de su madre y con errantes e inciertos cambios de domicilio. Allí, James ha levantado un instituto público (I Promise) para ayudar a niños y niñas en situaciones complicadas. En este curso albergará 330 estudiantes con la ayuda de su fundación (LeBron James Family Foundation) y la colaboración del organismo que gestiona los colegios de Akron. Para 2029 se esperan 1.200 jóvenes. Ocho años antes, este nuevo héroe americano ha garantizado matrículas gratis para la universidad de la ciudad.

Una acción no solo social, sino también política. El cuatro veces MVP no tiene problemas en dar su opinión sobre los problemas raciales que azotan Estados Unidos en estos tiempos. Y no suele recibir críticas por ello. No hay mucho rédito electoral en atacar a uno de los grandes ejemplos del sueño americano. Solo Trump lo ha reprendido públicamente tras la inauguración de su instituto y unas nuevas críticas contra el presidente en una entrevista con Dan Lemon de la CNN. "El tipo más tonto de la televisión ha hecho que LeBron parezca inteligente, lo cual no es fácil. ¡A mí me gusta Mike!", escribió en Twitter. Compañeros de James y diferentes personalidades del país salieron rápidamente en su defensa.

Allen Crabbe

Bron no fue el primero en moverse por su comunidad durante este periodo estival. El honor corresponde a Allen Crabbe. No fue tan mediática su acción, pero si igual de importante: el alero de Brooklyn Nets donó una cantidad de seis cifras para salvar su antigua alma matter, el instituto Frederick K.C. Price III Christian School al sur de Los Ángeles, fundado por su abuelo. El colegio se enfrentaba al cierre por la falta de fondos.

Derrick Rose

Derrick Rose también actuó en el plano educativo. Si en septiembre de 2014 donó un millón de dólares a After School Matters, una organización sin ánimo de lucro con sede en Chicago que ofrece ayuda a los estudiantes después de las clases, en este 2018 ha lanzado la iniciativa Rose Scholars: una beca de 400.000 dólares y otras dos de 20.000. "Espero brindar a los jóvenes un camino hacia la universidad que antes no estaba disponible para ellos", dijo el base de Minnesota Timberwolves.

Carmelo Anthony y Stephen Curry

A los tres se unieron Carmelo Anthony y Stephen Curry. El nuevo alero de Houston Rockets construyó en Sudáfrica su 23ª cancha de baloncesto y el base de Golden State Warriors recaudó 20.000 dólares junto a su hermano Seth, escolta de Portland Trail Blazers, para Ansar Mohammed y Letifah Wilson, padre y hermana de Nia Wilson. La adolescente fue asesinada por una cuchillada después de montar en un tren BART (Bay Area Rapid Transit) en Oakland el pasado julio. "Fue una tragedia sin sentido que no debería haber sucedido", dijo el dos veces MVP durante un partido solidario que vieron más de 78.000 personas. 

No fue la única acción del base. A través de la Fundación Ayesha & Stephen Curry, donó 25.000 dólares para que el experto en viajes de Web.com Schott Harrington pudiera pagar las facturas médicas en su lucha contra el linfoma de Hodgkin. ¿Cállate y dribla?