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El arranque de la competición estaba siendo una pesadilla para el “novato” Pablo Prigioni. Ni los más pesimistas del lugar podían prever un comienzo tan flojo. Por eso, el argentino presentó su dimisión y no seguirá en el club. Valencia, por su parte, jugó un partido muy serio en Vitoria y eso que se presentaba con cuatro sensibles bajas: Sastre, Diot, Williams y San Emeterio. Baskonia anunció a lo largo de la tarde los problemas musculares de Iván Martínez y la salida definitiva del equipo de Carlos Delfino, que estaba de temporero desde el pasado verano.

Salvo en los primeros compases, los taronjas fueron una apisonadora en el cuarto inicial. En los primeros 5 minutos, Erick Green anotó 7 puntos. El americano tuvo que irse al banquillo por una luxación en un dedo de la mano derecha aunque luego pudo volver a la cancha. Dubljevic hacía mucho daño a Diop, que se cargó rápidamente de faltas personales, y Poirier tuvo que entrar en acción antes de lo previsto. También Luca Vildoza apareció en el partido en los primeros compases, algo que no suele ser demasiado habitual. Para el minuto 6, el marcador señalaba un 7-14 bastante sintomático. Tan sólo Shengelia respondía con su habitual intensidad. Al final del primer acto, los de Vidorreta ganaban por 13-28.

Nada más comenzar el segundo periodo, Valencia se puso 18 puntos arriba pero Granger cogió el mando y cambió la dinámica del partido permitiendo a los vitorianos ganar el parcial del segundo cuarto (26-22). De todas maneras, encajando 50 puntos en los primeros 20 minutos, el conjunto de Prigioni lo va a tener complicado en ACB y casi imposible en Euroliga. El tercer cuarto arrancó con un Baskonia más entonado (46-50), De hecho, Valencia tardó 3 minutos en anotar (lo hizo Abalde con un triple, jugador que luego no paró y firmó un 3/3 en ese cuarto más allá de 6,75). Pero el equipo de Txus Vidorreta estuvo muy concentrado en todo momento (16/16 en tiros libres en el minuto 27) y volvió a estirar la goma de forma casi definitiva (51-67 a falta de uno para acabar la tercera fase).

La diferencia volvió a ser de 18 a favor de los taronja nada más iniciarse el último cuarto (54-72, min. 4). A partir de ahí, el partido fue derivando a minutos de la basura que sirvieron para deleite taronja sumando una nueva victoria. Green falló el primer tiro libre en el 36 (su equipo iba 19/19) y la máxima favorable a los visitantes llegó a ser de 20 puntos (58-78). La valoración final de los locales fue de 54 por los 105 de los levantinos. “Supimos reponernos a la lesión de Green en el primer cuarto y a una caída bastante seria de Doornekamp en el tercero. Ganar en Vitoria no es fácil”, aseguró Vidorreta. “No voy a comentar el partido. Dejo el equipo en otras manos para que el equipo salga de esta situación de tristeza. Soy impulsivo. Me duelo mucho no cumplir las expectativas”.