NEW YORK KNICKS 94-SAN ANTONIO SPURS 90

Willy Hernangómez impresiona en la nueva coronación de Carmelo Anthony en el Madison

El pívot español salió por segunda vez como titular en la NBA y no defraudó: 12 puntos y 9 rebotes. El alero estuvo soberbio para derrotar a San Antonio Spurs.

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Había una aroma enrarecido en el Madison. El encuentro con San Antonio Spurs era el quinto consecutivo en casa y en los anteriores cuatro nada había salido bien: 100% de derrotas y con lío por la expulsión de toda una leyenda como Charles Oakley en el duelo frente a los Clippers, que puso sobre la picota al dueño de la franquicia neoyorquina, James Dolan. Mal asunto. Malas vibraciones para recibir al segundo equipo de la NBA. Pero todo dio un giro con el héroe de siempre, Carmelo Anthony, y una estrella en constante crecimiento, Willy Hernangómez.

Entre los dos dieron alas a los Knicks para que se impusieran a unos texanos (94-90) a los que no les valió otra sublime actuación de Kawhi Leonard. Quién sino. El alero de los Spurs finalizó con 36 puntos, la 18ª ocasión en que iguala o supera la barrera de los 30 este curso. No está nada mal para alguien que la temporada pasada solo lo hizo en cuatro ocasiones.

La cuarta ausencia seguida de Noah abrió la puerta de la titularidad por segunda ocasión a Hernangómez y el español supo aprovecharlo como la primera vez. En su debut en el cinco inicial logró 15 tantos y 14 rebotes (Washington Wizards) y este domingo llegó a los 12 (con dos canastas preciosas incluidas) y 9. Aunque lo más importante no fueron esos guarismos, sino su dureza, inteligencia y seriedad en ambos lados de la cancha. Su recompensa puede ser el partido de los novatos del All Star por la lesión de Embiid.

Pero su influencia tuvo que esperar porque los Spurs salieron a la pista a matar. El animal estaba herido y había que rematarlo lo antes posible. "No hay que hacerles sufrir demasiado", debieron pensar los pupilos de Gregg Popovich. Del 18-21 al 42-48 fueron 24 minutos de dominio visitante hasta que llegó Carmelo y volvió a ponerse la corona del rey del Madison. Mucho tiempo sin ver esa incidencia en los momentos claves.

El alero llegó al descanso con cuatro puntos y finalizó el duelo con 25. Un triple suyo completó un parcial 9-0 (51-48) en cuatro minutos y desde ahí al cielo. Rabia, mucha rabia mostraba cada vez que celebraba una canasta, que se fue un poco más allá cuando enlazó dos canastas seguidas que remataron el encuentro (92-86). ¿Se acabó el drama en el Madison? Son los Knicks, así que las cosas más estrambóticas pueden pasar. Hoy por ejemplo dejaron a un equipo diferente de los Nets por debajo de los 100, algo que no lograban desde el 12 de enero. 14 partidos. No está mal.