Cuando el Valencia parecía remontar la ventaja azulgrana al descanso (44-30) para colocarse a solo tres puntos (59-56), surgió Tyrese Rice para endosar tres triples consecutivos sin fallo en solo dos minutos (después anotó otro más) y rescatar a su equipo para una valiosa victoria (94-82) que le da el segundo puesto de la tabla y le permite seguir a la estela del Real Madrid, líder.

Rice tuvo en Justin Doellman (18 puntos) al otro ejecutor del equipo de Pedro Martínez, acompañado por el capitán Juan Carlos Navarro y de un Tomic en su línea (10 puntos y 7 rebotes). La otra cara de la moneda fue el Valencia, segunda mejor defensa de la Liga (73,6 puntos encajados de media), que fue muy irregular y mantuvo su ataque merced a tiros libres (28 de 29) y a acciones intermitentes de Luke Sikma, Will Thomas y Rafa Martínez. Incluso su máximo anotador, el montenegrino Bojan Dubljevic sumó 10 puntos, pero solo una canasta en juego. Con 21 canastas de 40 intentos de dos y 4 de 14 de tres no se puede plantar cara al Barcelona (12 de 28 en triples y 22 de 30 de dos).

Había mucho en juego y el Barcelona se transforma cuando salta al a la pista del Palau; más ahora que Bartzokas ya tiene a casi todos sus efectivos y sus mejores bazas están recuperando su forma. También el Valencia sabía que la victoria era importante para seguir a la estela del Real Madrid, pero tuvo un grave problema. Ninguno de sus tres bases estuvo a la altura. Los puso a todos, Diot, Vives y Van Rosson, pero en toda la primera mitad solo fueron capaces de lograr dos asistencias, mejoraron poco en la segunda y esto les pesó en sobremanera.

En los compases iniciales el buen juego de Diot y Sato mantuvo a su equipo con ligeras ventajas (13-16, min. 7), pero un triple de Navarro, que igualaba la contienda (16-16, min. 8) y le llevaba a superar la barrera de los 8.000 puntos en la Liga para convertirse en el cuarto máximo anotador de la competición. Este triple abría un parcial de 10-0 para los azulgrana (23-16) cortado por un tiempo de Pedro Martínez y cuatro puntos seguidos de Dubljevic recortaban al final del cuarto (25-20).

Lo peor vendría para los taronja en el segundo cuarto en que encajaban un parcial de 19-10 en un ataque desastroso en el que solo Will Thomas sumó canastas en juego (3) mientras la defensa alternativa, con cambios constantes de zona a individual no frenó la efectividad de Oleson, Tomic o Rice que, con un parcial de 7-0 llegaba al descanso con la máxima ventaja local (44-30).

Tras el descanso, los hombres de Pedro Martinez salieron más centrados en defensa, frenaron de salida a Doellman, cerraron el rebote y con Luke Sikma espectacular (9 puntos casi seguidos) y Fernando San Emeterio rompiendo la zona catalana, los visitantes reducían diferencias tras la primera canasta de Kravtsov (59-56, min. 28).

En ese instante surgió la 'magia' de ese pequeño gigante llamado Tyrese Rice con dos triples en apenas un minuto, le siguió otro de Doellman y cerró el mismo Rice con otro triple para un parcial en dos minutos de 12-2 y cerrar el cuarto con un tranquilo 71-58.

Los visitantes quedaron 'tocados' y Rice abría el último cuarto con su sexto triple (74-58) y después le seguía Oleson para ser el séptimo de Rice que hacia llegar la veintena de ventaja azulgrana (82-62, min. 35). Viendo que los bases valencianistas no podían parar a Rice (había sumado cinco triples seguidos sin fallo), Bartzokas optaba por colocar a Renfroe junto a él y jugar con doble base. El Valencia reaccionó a base tiros libres y recortaba tras una canasta de Sikma (84-71, min. 36). Bartzokas pidió tiempo y Navarro, Renfroe y Vezenkov dejaban las cosas como estaban (92-73, min. 38) aunque hubo una ligera e inútil reacción valenciana hasta el final (94-82).