LeBron se queja: "Cuando me pegan a mí no hay flagrantes"
"Veo otros partidos y parecen otras reglas. Igual tendría que exagerar, dar vueltas por el suelo, llevarme las manos a la cabeza...".
Las cosas van de maravilla en los Cavaliers: 9-0 en playoffs y la sensación de que solo un milagro evitaría que los de Ohio se quiten de en medio a los Raptors y repitan viaje a las Finales. LeBron James está jugador liberado y a gran nivel, esta vez además con Kyrie Irving y Kevin Love sanos… pero no está del todo contento porque, y no es la primera vez que hace explícita esta queja, considera que los árbitros no le tratan a él igual que a los demás.
LeBron cree que su poderoso físico le juega una mala pasada porque permite que sus defensores le peguen con una impunidad que no tienen contra otros rivales: “Ya no sé qué es una falta flagrante. Sí lo veo en otros partidos y con otros jugadores, pero cuando me dan a mí parece que las normas son otras. Ahora para que piten flagrantes tienes que tirarte por el suelo, dar vueltas, llevarte las manos a la cabeza… eso hacen otros: exagerar y pasarse 30 ó 40 segundos por el suelo.
Hace unas semanas, Tyronn Lue ya se encargó de afirmar que LeBron era el “el Shaquille O’Neal de los aleros”, en referencia a que al histórico pívot, con el que compartió vestuario en los Lakers, también le pegaban mucho más que a otros para intentar pararle, y que por su tremendo físico parecía que ante los árbitros esos golpes tuvieran menos importancia. Phil Jackson se encargaba de recordarlo en cuanto podía ante los medios de comunicación en los tiempos del threepeat de los angelinos.