CLEVELAND CAVALIERS 106-CHICAGO BULLS 95

LeBron chafa la continuidad de Pau Gasol en unos Bulls rotos

La estrella de los Cavaliers hundió la leve resistencia de Chicago con 25 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias. El español, 14 tantos y 9 capturas.

A principios del enero, los Chicago Bulls se encontraban en una situación idílica. El equipo funcionaba bien, era una máquina engrasada que se situaba en la parte alta de la clasificación en el Este con 10 partidos por encima del 50% de victorias. Una gozada. Se soñaba con asaltar el trono de unos Cavaliers a los que ya habían ganado dos veces esta temporada. Era enero. Ahora, a mediados de febrero, todo se ha desmoronado. El castillo se ha derrumbado con soplidos diversos en formato lesión y de rumores de entradas y salidas.

Y este panorama de desconcierto y agonía no da rentabilidad cuando viajas a Cleveland. Menos aún ante la Cleveland que trata desesperadamente de encontrar nuevas fórmulas para viejos problemas y, así, tener la oportunidad de plantar cara, en unas hipotéticas Finales, a los Golden State Warriors. LeBron James es el principal impulsor de la renovación de Lue. Quién si no iba a ser. El Elegido tiene una responsabilidad aún mayor que en el pasado, pues tiene que traer el campeonato. Es Atlas cargando el mundo a sus espaldas. Esa determinación se vio en los 35 minutos que estuvo sobre la cancha. Veremos si él y todos la tiene mañana, pues son bastante bipolares, para que nos vamos a engañar. El alero acabó el encuentro rozando el triple-doble con 25 puntos, 9 asistencias y 9 rebotes. Esta vez, los de Ohio no tiraron excesivamente de su potencial ofensivo. Irving llegó a los 19, Love, a los 15 y Tristan Thompson a los 16. 

La alegría en el juego mostrado por los Cavaliers (con un vestuario algo ensombrecido con la marcha de Varejao, toda una institución en la franquicia) en momentos puntuales del partido, con ataques rápidos y mucha rabia/presión defensiva, condenaron a estos mermados Bulls. Ni Noah, ni Mirotic, ni Butler jugaron por lesión. Hinrich ya hizo sus maletas para Atlanta. El base se va de Chicago después de 11 temporadas en dos etapas diferentes y con el orgullo de estar sólo por detrás de Jordan y Pippen en la historia de la franquicia en cuanto a partidos disputados, asistencias y robos. "La peor parte del negocio", como diría James.

Pero tanta baja no justifica la ausencia en el movimiento del balón, ni la ausencia de un propósito en ataque. Los Bulls acabaron con 12 asistencias y 13 perdidas de balón. Las lesiones no justifican que la defensa decidiera quedarse en el banquillo tras el descanso. Los Cavaliers llegaran al 51% en tiros de campo a la vuelta de los vestuarios, anotaron un punto en la pintura por minuto (48) y atraparon 52 rebotes. Una vez más, la falta de nivel atrás permitió que el rival superara la barrera de los 100, es el octavo partido consecutivo que ocurre esto. Muchas lagunas que una buena versión de Rose (28 tantos, 11/19 en el lanzamientos) y la contribución diaria de un Pau Gasol (14 y 9), que a pesar de los rumores continuará, al menos, hasta final de temporada en Illinois, no pudieron tapar.

La derrota es la quinta seguida que sufren los Bulls, sumando 14 en los últimos 19 duelos disputados. Una hecatombe que les ha llevado a la octava plaza en el Este con un balance 27-26 (Detroit es noveno con 27-27) y ahora tocan los Raptors, segundo en la Conferencia. Parecía casi imposible, pero esto puede empeorar. Increíble.

Lo más visto

Más noticias