Memphis había protagonizado un arranque de ensueño. Invicto y liderando el salvaje Oeste con su mejor inicio de siempre (6-0). Y parecía que iban a seguir por la misma senda victoriosa en Milwaukee... hasta que apareció Brandon Knight. Con 90-92 a favor de los Grizzlies, el base sorteó la defensa de Marc a la altura de la línea de tres para irse hacia el aro con valentía, recibir la falta de Courtney Lee (error infantil el suyo y que desespera a cualquier técnico de categorías inferiores: si haces la personal, asegúrate de que el atacante no sea capaz de levantar el balón) y anotar la bandeja con comodidad a 1,1 segundos para el final. No le tembló el pulso desde la línea y decidió el partido: 93-92 para los Bucks y delirio en el Bradley Center. "Es algo con lo que sueñas desde niño", comentaba poco después el héroe (autor de 14 puntos y seis asistencias). El intento a la desesperada del propio Lee para enmendar su error no fructificó.

Marc Gasol no tuvo su mejor noche pese a acabar con 18 puntos y cuatro rebotes. El español fue un seguro desde la línea (10/11), aunque estuvo más errático de lo que acostumbra en el lanzamiento (4/11). Otro que tampoco tuvo su mejor noche fue Mike Conley. Con ellos apagados, fue Zach Randolph quien le tomó el relevo como líder anotador de los de Tennessee con sus 22 puntos y 14 rebotes. "Tuvimos que dar muchos minutos a nuestros mejores hombres ayer ante los Thunder y esta noche nos tocó hacerlo también. Fallamos algunos tiros que no deberíamos y no conseguimos sumar suficiente desde otros sitios", analizaba David Joerger, técnico de los Grizzlies.

Y es que, precisamente la gran diferencia estuvo en la aportación del banquillo. El local sumó 46 tantos por sólo 27 del de los osos. Para ello fue clave la aportación de Giannis Antetokounmpo. El polifacético griego va despertando para clavar 18 tantos como 18 puñales a la defensa de Memphis. Estuvo bien secundado por Jabari Parker. El rookie no acaba de despegar, pero sus números se mantiene parejos noche tras noche: ayer 13 puntos y cuatro rebotes para contribuir al primer triunfo de Milwaukee ante un rival del Oeste en su primer duelo del curso (3-27).

Por su parte, a Memphis le toca levantarse y seguir sumando. Los Lakers asoman por el horizonte y la premisa no varía: seguir sumando triunfos para evitar el sufrimiento del año pasado por entrar en playoffs. "Estamos en el Oste, por lo que cada partido importa tanto si es en noviembre como si en marzo", avisa Joerger.