BULLS 101 - CELTICS 106

Boston tira de orgullo y acaba con la racha de Pau y los Bulls

Chicago no pudo culminar la remontada y acabó perdiendo su segundo partido del curso ante unos Celtics sin Rondo. Gasol: 19 puntos y 9 rebotes. Presencia testimonial de Mirotic.

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NBA

Tras el tropiezo en el segundo partido de la temporada en la prórroga ante los Cavs, Chicago había contado sus cuatro partidos posteriores encuentros con victorias. Una racha que se vio truncada esta madrugada ante los Celtics en el United Center. Boston tiró de su viejo orgullo para infligir a los Bulls su segunda derrota en casa (101-106). Sin Rajon Rondo, su auténtico líder (quien se quedó en Boston para que le retiraran un tornillo de su recién operada mano izquierda), y el lesionado Marcus Smart (esguince en el tobillo izquierdo), hasta siete jugadores de los de Stevens anotaron en dobles figuras para acabar logrando un triunfo merecido y de prestigio que se les complicó sobremanera en los últimos minutos. Cerca estuvieron de tirar por la borda el gran trabajo realizado durante toda la noche: del 73-90 a 9 minutos para la conclusión se pasó al 98-100 cuando aún quedaban 37 segundos por disputarse.

Fue en este periodo cuando emergió un espectacular Aaron Brooks. El base se disfrazó del mejor Rose (de nuevo ausente por sus respectivos esguinces en ambos tobillos) para anotar 19 de sus 26 puntos en el último periodo. La reacción de Chicago estuvo bien secundada por un buen Joakim Noah (13 tantos, 11 rebotes y seis asistencias), pero que tuvo que conformarse con ver desde el banquillo los dos últimos minutos. "Siempre me preocupo", se limitó a explicar Tom Thibodeau, haciendo referencia implícita a la cirugía en la rodilla izquierda a la que se sometió el francés este verano.

Esta restricción en sus minutos de juego fue la que permitió que Pau Gasol pudiera disputar los 120 segundos finales tras presenciar la remontada de su equipo en el cuarto parcial desde el banquillo. Aún así, volvió a firmar buenos números: 19 puntos (8/17 en tiros de campo) con nueve rebotes y tres asistencias. En su debe, un rebote defensivo que dejó escapar ante Kelly Olynyk (partidazo del canadiense con 18 tantos y 11 rebotes) y que acabó siendo clave. De haberse hecho con él, Chicago hubiera tenido posesión con 98-100 para empatar o ganar el partido. Ahí murieron las opciones de los locales: tras mucho nadar contracorriente acabaron ahogándose en la orilla. En el carrusel de tiros libres, los de Massachusetts no perdonaron y acabaron luciendo un récord de tres victorias y otras tantas derrotas. Antes, la presencia de Mirotic en pista resultó testimonial. Cinco minutos y dos personales. Ese fue su bagaje.

Lo cierto es que los de Illinois pagaron en la primera mitad el gran esfuerzo de los últimos días, en los que han dispautado cuatro encuentros en las cinco últimas jornadas. Pese a ello, los Bulls no quieren que esto sirva de excusa: "No, no fue eso. Jugamos mal y ellos han tenido un calendario similar", reconocía Brooks. No obstante, sólo así se se puede explicar el cortocircuito que sufrieron ante la intensidad de los Celtics en la segunda mitad del segundo cuarto. En un abrir y cerrar de ojos se pasó del 35-34 al 41-56 con el que se llegó al descanso. Sonrojante parcial de 16-36 en este periodo. Y no fue la única buena noticia para los seguidores del equipo más laureado de la NBA: Evan Turner jugó su primer gran partido como celtic al firmar 19 puntos y seis asistencias. Igual que Marcus Thornton (11 tantos), supo aprovechar la baja de Rondo y Smart.  

Ahora Chicago cuenta con dos días para descansar antes de recibir a los Pistons. Quién sabe si ya con Rose en el equipo para poder proseguir con su condición de invicto a domicilio (Toronto, Los Ángles y Sacramento aguardan) y amenazar así la racha de los Bulls de Michael Jordan como visitantes. Esto no ha hecho más que comenzar.