La fiesta anual del Fin de Semana de las Estrellas, que se celebra en Dallas, se ha convertido en el primer lugar donde los jugadores han comenzado a mostrar su "rechazo completo" a lo que desean los dueños de las franquicias para el nuevo convenio colectivo y a los comentarios de algunos ejecutivos de la liga.

Después que el director ejecutivo del sindicato de jugadores, Billy Hunter, les presentó la propuesta de los dueños, los jugadores vieron de inmediato que el futuro laboral dentro de la NBA iba a estar más que complicado.

Pero todavía fue mayor su "oposición" cuando Hunter les hizo llegar el comentario que un ejecutivo de la liga, sin identificar, hizo a CBSSports.com sobre lo que podrían hacer las estrellas de la NBA si no aceptaban lo que les proponían los dueños en cuanto a la reducción de los salarios y un tope en los contratos.

De acuerdo a Hunter, el directivo dijo que si a las estrellas no les gustaba el nuevo tope salarial en sus contratos, entonces podrían abrirse paso en otros deportes o profesionales.

Concretamente, en el comentario del ejecutivo se incluyo al alero LeBron James, de los Cavaliers de Cleveland, y al escolta Dwyane Wade, de los Heat de Miami.

"Si a ellos no les gusta el nuevo tope en los contratos, LeBron puede jugar fútbol americano, donde ganará siempre menos de lo que podrá recibir con la propuesta. Wade puede ser modelo o lo que desee", declaró el ejecutivo de la liga a CBSSports.com, de acuerdo a Hunter. "No harán nada y en pocos años nadie los recordará", vaticinó.

Hunter señaló que los dueños no se imaginaban la reacción inmediata de rechazo que han tenido los jugadores.

"Creo que quizás subestimaron la respuesta, el rechazo que iban a recibir de la propuesta", comentó Hunter, quien reiteró que la misma afecta a "todos los jugadores en todos los niveles en la NBA, algo que podrían haber pensado los responsables de la gestión".

Los dueños también quieren que el porcentaje de los ingresos destinados a los jugadores se reduzcan del 57 por ciento a menos de la mitad.

Hunter respondió que los jugadores en lugar de renunciar a tanto, la NBA necesita ampliar su participación en los ingresos de exigir que los equipos con los mercados más grandes ayuden a los pequeños.

"Nuestra posición fue que era un imposible", señaló Hunter al valorar la propuesta. "Además quieren que el convenio esté definido antes del 1 de julio lo que demuestra que desean que los nuevos contratos tengan carácter retroactivo para que se puedan ajustar al mismo", añadió.

Las estrellas encabezadas por James, Kevin Garnett, Carmelo Anthony, Chris Paul y Derek Fisher, entre otros, fueron las que durante la reunión con la liga mostraron su rechazo completo a la propuesta y advirtieron que los jugadores no iban a "ceder".

Sin embargo, los dueños también tienen muy claro que el actual sistema económico que se da dentro del convenio colectivo que está a punto de concluir no es asumible de la al futuro de la gestión financiera de sus respectivas organizaciones.