El juego interior da una cómoda victoria al Madrid

ACB | Bruesa 78 - Real Madrid 94

El juego interior da una cómoda victoria al Madrid

El juego interior da una cómoda victoria al Madrid

DANI SÁNCHEZ

El Real Madrid se ha impuesto con facilidad al Bruesa GBC en Illumbe, en un choque que los visitantes han dejado encarrilado en la primera parte, gracias a su dominio debajo del aro, y en el que los guipuzcoanos no han sabido aprovechar los puntos débiles de los merengues.

Los visitantes han saltado a la cancha de un modo arrollador y parecía que iban a sentenciar el partido temprano, aunque los jugadores del conjunto donostiarra han despertado a tiempo para que la diferencia no fuese insalvable desde los primeros minutos (18-25).

El segundo cuarto ha comenzado como el primero, con un claro dominio del Real Madrid pero, a medida que han transcurrido los minutos, los hombres de Pablo Laso se han metido en el partido bajo la batuta de un excelente Sergio Sánchez que, según parece indicar, se convertirá en la referencia ofensiva de los guipuzcoanos.

Los dos últimos minutos han sido inciertos para el Bruesa GBC porque, tras varios errores tanto de los jugadores como de los árbitros, se han ido al vestuario con una diferencia que no reflejaba en absoluto lo visto sobre la cancha del coso taurino de Illumbe (41-53).

Tras el descanso, ninguno de los dos conjuntos ha estado acertado a la hora de anotar y el Real Madrid nunca ha visto amenazada su diferencia gracias a su superioridad en el juego interior con un omnipresente Felipe Reyes.

El Madrid no ha dejado patente en ningún momento sobre el parqué de Illumbe que es un equipo en construcción con un tercio de su plantilla recién llegada sino, más bien, todo lo contrario, un conjunto consolidado que combina su veteranía con jóvenes promesas destacadas como Sergio Llull (53-71).

El último acto no ha dejado de ser un puro trámite para los madridistas que no han visto amenazada su ventaja de en torno a 20 puntos en ningún momento e incluso han sido capaces de aumentarla sustancialmente ante un Bruesa que, lógicamente, debía arriesgar.

A pesar de ello, el conjunto donostiarra no se ha creído en ningún momento de este periodo una posible remontada, porque la diferencia de los madrileños en el luminoso pesaba psicológicamente como una gran losa para el Bruesa GBC.