Victoria por orgullo en un partido que cambió de dueño unas cuantas veces. Pamesa ganó porque es mejor que el Fuenlabrada y porque los de Casimiro huelen a descenso tanto como Pamesa a equipo de playoffs.
Tuvo el Fuenlabrada el partido ganado ante la actitud de Pamesa, más centrado en mejorar su rebote y equilibrio de juego para la ULEB que en seguir en la quinta posición de la ACB. Fueron valientes los madrileños durante los primeros minutos y pronto cogieron renta, que desapareció en el último arreón valenciano antes del descanso. Tras los vestuarios, los valencianos se hundieron y consiguieron los de Casimiro volver a liderar en el electrónico hasta que Katsikaris entendió que Oliver era lo que su equipo necesitaba.
Con el catalán en pista, el equipo valenciano cambió su actitud y se convenció de la necesidad de victoria. Douglas anotó todo lo que tenía que anotar y Pamesa se aprovechó para seguir estable en la quinta plaza.