El Madrid arriesga la Copa

ACB | Real Madrid 77 - Unicaja 86

El Madrid arriesga la Copa

El Madrid arriesga la Copa

Diario AS

El cuerpo a cuerpo por la Copa del Rey entre el Real Madrid y el Estudiantes asistirá a un colofón apasionante la próxima jornada, con ambos equipos pendientes el uno del otro merced a la derrota blanca en Vistalegre ante el Unicaja y la campanada colegial en la cancha del Gran Canaria.

El Madrid pudo dar la vuelta al choque con los andaluces en el tercer cuarto, pero el estadounidense Marcus Brown dejó sin efecto la reacción que el equipo del serbio Bozidar Maljkovic gestó dentro del vestuario en el intermedio.

Pedro Martínez ha entrado con buen pie en el Estudiantes. Los colegiales ganaron el primer partido con el técnico catalán al frente en la pista del difícil Gran Canaria, uno de los mejores equipos de la campaña, lo que añadió presión a los blancos en la carrera por la Copa.

La ventaja que favorecía al Madrid en el pulso copero con los chicos del Ramiro de Maeztu es ahora mínima después del triunfo estudiantil sobre los canarios. Los madridistas están obligados a ganar la próxima jornada al Joventut en Badalona porque si el Estudiantes supera en casa al CB Granada les adelantará en la tabla. Si los dos perdiesen, el Madrid obtendría la clasificación, pero el riesgo para los de Vistalegre ha crecido hasta el mismo límite.

Unicaja sale concentrado

Resulta que el Unicaja también salió al parqué de Carabanchel pendiente del pasaporte copero y necesitaba llevarse el partido para esperar tranquilo la apasionante próxima jornada, la más incierta de toda la historia de la ACB en clave de clasificación para la Copa.

El italiano Sergio Scariolo conoce bien al Madrid y cada día hace más sólidos a los andaluces. El transalpino ha enseñado el camino a los suyos con hechos contundentes en forma de éxitos ante los poderosos Panathinaikos griego y CSKA Moscú ruso, ambos en la Euroliga. Por eso, el Unicaja va a por todas en todas las pistas y también en la madridista, que no se le da demasiado bien.

En esta ocasión, los malagueños salieron a por todas. Concentraron los ataques dentro de la zona para el puertorriqueño Daniel Santiago y Jorge Garbajosa y, pese a que tanto el pívot boricua como el estadounidense Marcus Brown quedaron momentáneamente fuera del choque en el primer cuarto lastrados por la segunda personal, el Unicaja abrió el hueco que necesitaba para sentirse cómodo (14-23).

El Madrid adolecía nuevamente de esa lentitud que a veces se apodera de él cuando ataca. Para colmo, el ansia y las ganas de ayudar confundieron al serbio Igor Rakocevic y la defensa visitante, ordenada e intensa, neutralizó al estadounidense Louis Bullock, que tardó diecisiete minutos en anotar la primera canasta en juego y cerró la primera parte con sólo tres puntos.

El empuje que los rebotes de Felipe Reyes supuso para el baloncesto madridista apenas sirvió para algo por la parsimoniosa circulación de balón del Madrid, que en los prolegómenos del intermedio cedió una desventaja de catorce puntos (25-39).

Cambio en el tercer cuarto

El campeón de la ACB logró cambiar el ritmo del partido ya dentro del tercer cuarto. Un parcial de 11-2 en la salida reactivó el choque (38 41 m.25). Además de la escalada en el marcador, el Madrid también arrancó la tercera personal de Brown en medio de una metamorfosis generalizada. El Madrid había regresado del vestuario con otra cara. Brown, a pesar de las complicaciones, también.

Reyes todavía hacía latir el corazón madrileño, aunque no en solitario. Rakocevic también se centró y formó con el internacional español el dúo responsable de la reacción. El Unicaja, de todos modos, capeó el temporal sin descomponerse. Brown olvidó los problemas con las faltas para darle aire al bloque de la Costa del Sol, que acabó el tercer corte por delante gracias a una gran jugada de Jorge Garbajosa con triple y adicional (47-52) después de que el estadounidense emergiera en los instantes más comprometidos.

Los blancos encajaron el golpe y no pestañearon. Esperaron el último y definitivo cuarto sin perder la concentración. El francés Moustapha Sonko asestó un zarpazo triple que situó el choque en un pañuelo de salida (50-52), pero la remontada madrileña se detuvo sin rematar la faena.

Unicaja puede con la presión

Brown salió otra vez en auxilio de los verdes. Cuatro puntos del escolta y dos de Berni Rodríguez evitaron que el Madrid igualase el resultado mientras el reloj avanzaba inexorable (52-58 m.34).

La única diferencia favorable a los locales quedaba en el 2-0 inicial y el Unicaja conseguía amasar la diferencia que le permitió dominar el choque en los tres últimos minutos, cuando los locales mordían para intentar salvar la cara, un esfuerzo que prolongaron hasta la bocina a golpe de personal, aunque sin suerte.