El ‘caso Negreira’ va camino de convertirse en nuestro propio ‘Caso de casos’.
Tratándose del Barça, sabemos lo barato que resulta pedir perdón, incluso desdecirse.
Hace tiempo dejar un solitario gol en el marcador nos parecía una mourinhada...
A la Supercopa se la fue vaciando de contenido y significado hasta lo que hoy se presenta
El Mundial de Qatar ha servido para poner de manifiesto los muchos prejuicios que algunos albergan sobre el fútbol, ahora con las redes sociales como grandes aliadas
Ocurrió que la España del todo mal lo hizo casi todo bien en su debut mundialista, con una puesta en escena primorosa que ya trae de cabeza a cuantos esperaban un primer descalabro camino de la Gran Depresión.
Cualquiera hubiese preferido un Brujas o cualquier otro caramelo para ir abriendo apetito.
Ante el Villarreal el equipo se puso a danzar como los ángeles y nos recordó que el Barça también es esto...
Si la dirección deportiva no contempla su regreso, deberían valorar marcharse.
Ni siquiera Messi tiene la capacidad de chantajear a quienes redactan y aprueban los contratos.
Los resultados de Anoeta y el Pizjuán son un impulso moral que no se debe despreciar...
Casemiro pertenece a esa estirpe que saca de sus casillas a los rivales y da paz al amigo...
De momento, el Barça no ha tenido que vender a Pedri ni a Ansu Fati, como algunos aventuraron...
Los fichajes de Lewandowski y Raphinha nos han devuelto a un escenario que creíamos olvidado tras el confinamiento: el de la España de los balcones, la que decide lo que debes hacer...
Por ver al brasileño tirando sombreritos en la banda del Camp Nou daría lo que fuera
El club le debe tanto dinero que cualquier apelación a la seriedad podría parecer una broma.
Campeona de Europa, mamá. Disfrútalo y mortifica cuanto quieras, para eso se inventó el fútbol. El abuelo dejó el barco en buenas manos.
Es como la retórica que algunos bardos del madridismo han utilizado para dar por enterrado a Pep Guardiola tras la derrota de su equipo en el Bernabéu.
No hay nada de malo en querer que el Madrid pierda siempre o casi siempre, solo faltaría.
No hay club más clásico ni más práctico que el Real Madrid, donde el afecto al delantero es directamente proporcional al peso de los goles.
Estás en tu derecho de no entender la naturaleza y hasta la intensidad de la celebración.
Pudo dimitir y devolver el golpe a Laporta. Pero optó por quedarse y cobrar hasta el último euro.
Nada parece suficiente para los culés y todo es susceptible de apretar los puñitos, incluso aquellos años bárbaros de Cruyff, Guardiola y el éxito por castigo.
Cualquier fichaje es susceptible de ilusionar o hundirte en la miseria a partes iguales.
Página2