Este 2021 ha sido un año de reencuentros. Vallecas recuperó su alma, con la afición en la grada, y también su voz, la de Rafael García Navas. El speaker cogió, de nuevo, el micrófono contra el Barça, después de una larga ausencia y de haber estado tres veces al borde de la muerte. Sonríe cuando escucha el cántico de 'El año que viene, Rayo-Liverpool', con la satisfacción de haber sido su creador y la ilusión de que al fin pueda hacerse realidad...
Hay sonidos que nos evocan lugares, casi por arte de magia. Vallecas tiene los suyos propios. Una banda sonora única e irrepetible, compuesta por los cánticos de la grada, algunos acordes míticos que retumban por la megafonía y una voz que forma parte ya del imaginario colectivo de la hinchada rayista. "Posiblemente la mejor afición del mundo", tal y como grita a pleno pulmón, antes de cada partido en casa, Rafael García Navas (Herencia, Ciudad Real, 6 de agosto de 1947).
"Este es un barrio humilde, acogedor, obrero... y rockero"
Es el speaker de la Franja desde hace casi dos décadas y está de vuelta después de dos años de ausencia y de haber esquivado a la muerte hasta en tres ocasiones, por un accidente doméstico y el cáncer. Todo un ejemplo de fortaleza y resistencia, de perseverancia y fe, como su Rayo. Al que soñó en Europa mucho antes de aquella histórica participación en la UEFA de la 00-01. "Yo inventé la canción 'El año que viene Rayo-Liverpool', en el ascenso de la 88-89 contra el Coruña, entonces no se le llamaba Depor. Pertenecía a la Peña Rayista La Bota y para dar ambiente lo empezamos a cantar por la calle, también sonó en el campo y luego cayó en el olvido. Ahora cuando lo entona el estadio me emociono", relata este manchego de nacimiento y vallecano de adopción.
Allí llegó, a casa de sus tíos, para continuar sus estudios en el Ramiro de Maeztu. "De pequeño era del Real Madrid por Di Stéfano, Puskas… pero viviendo en el barrio me hice abonado del Rayo hace 53 años y nunca me he borrado. Tengo el número 52. Siempre he viajado con mi bandera, entonces no había bufanda, y una trompeta de estas de los basureros para hacer ruido", ríe, porque le gustan los decibelios.
Mägo de Oz, Ska-P, AC/DC, Guns N' Roses... son habituales cuando Rafa está a los mandos. "Vallecas es rockera. Un barrio acogedor, humilde, obrero, maravilloso… Mis hijas y nietos son vallecanos y del Rayo", confiesa orgulloso: "Mira, la gente lo vive. 'La vida pirata' es un himno. Cuando pongo 'La fiesta pagana’, pienso que podría ser Anfield o el viejo Old Trafford. Vallecas tiene el encanto de los campos ingleses, con la afición encima e incluso el estilo de juego, directo, es muy de allí. El ambiente es la leche, quien viene, siempre repite".
"Iraola me dijo: 'Creas esa atmósfera que necesitamos"
Iraola elogió su trabajo para que ruja Vallecas ("creas esa atmósfera que necesitamos", le dijo), ya que este antiguo corredor —colecciona 36 maratones en sus piernas— le imprime su propio sello. "Fuimos los primeros en dar la bienvenida a la afición visitante y de esto hace 16 años, que se lo dije a Tebas. Y para los goles elegí 'The final countdown' de Europe. Justo habíamos descendido y simbolizaba la cuenta atrás para volver, pero cuando subimos ya me dijeron que la dejara", afirma.
Regresó por la puerta grande, con la victoria frente al Barça. "Me llamó el presidente y accedí. Esto me da la vida. Siento que hago algo por los demás y me llena", explica un activo Rafa, que está escribiendo un libro y ha puesto letra al himno de España. "Voy a mandar una carta a Alejandro Blanco para darle un empujón", anuncia. Este 2021 Vallecas no sólo ha recuperado su alma, con la afición en la grada, también su voz...